El precio de una bicicleta de un equipo profesional, lo último en tecnología, con el carbono más ligero y resistente y los componentes de más alta gama, supera con mucha holgura los 6.000 euros e incluso roza los 9.000. La alta competición exige lo mejor. Y por eso las consecuencia de un robo resultan fatales en términos logísticos y económicos.

El equipo profesional italiano Lampre-Merida, la formación por la que ha fichado el reciente campeón del mundo Rui Costa, donde compiten Pippo Pozzatto o Damiano Cunego y donde competirá en 2014 el alicantino Rafa Valls, ha visto como unos amigos de lo ajeno han accedido el almacén que tiene en Usmate Velate y han arrasado con todas las existencias.

Aunque el equipo italiano no ha facilitado cifras, a través de su web admite que los cacos han robado "numerosas bicicletas" ya montadas, modelos de la firma Merida que van desde bicis para la escalada hasta para la contrarreloj. El botín no ha quedado aquí. También se han llevado cuadros, cambios de última generación, ruedas, sillines o medidores de potencia, entre otros muchos componentes. La venta de todos estos últimos componentes es mucho más fácil a través de Internet.

En algún momento entre la tarde-noche del sábado y la mañana de este lunes los ladrones accedieron al recinto rompiendo un cristal y desactivando todas las alarmas. La formación ciclista transalpina ha hecho un llamamiento a través de Internet y las redes sociales para intentar recuperar el material y encontrar a los ladrones.

El Lampre-Merida en 2014 contará con 23 ciclistas en su plantilla y los cacos aprovecharon los preparativos de la inminente pretemporada. Normalmente cada corredor recibe una bicicleta para sus entrenamientos (en algún caso, de cara a preparar la contrarrelojes, dos) y tiene al menos otras dos a su disposición. En el caso del Lampre se podrían haber robado más de medio centenar de bicicletas que rondarían un valor de 400.000 euros.