"La letra, con sangre entra". Eso debió pensar Adel Tlatli, entrenador de Túnez, que en el partido ante Estados Unidos utilizó esta técnica para que uno de sus jugadores, algo despistado, le prestara antención en la charla táctica que estaba dando antes del comienzo del choque correspondiente a la fase de grupos de los Juegos Olímpicos de Londres.

Con un tortazo en la cara, el técnico quiso llamar la atención del jugador. Un gesto que quedó grabado por las cámaras y cuyo vídeo circula como la pólvora por internet.

Los libros dirán que Estados Unidos barrió a Túnez por 63-110, pero David fue capaz de bailar a Goliat durante unos minutos que los africanos no olvidarán en sus vidas, aunque precedieran poco después a un sometimiento absoluto a manos de los vigentes campeones olímpicos.

Y es que en segunda mitad cambió el panorama. Estados Unidos recobró su personalidad con contraataques marca de la casa y un derroche ejemplar de energía en defensa.