A la conclusión del Betis-Sevilla, directivos de ambos equipos se enzarzaron en un virulento cruce de declaraciones que siguió a la negativa de los dirigentes sevillistas a recibir un presente conmemorativo del centenario de su eterno rival e incluso a un presunto conato de agresiónal presidente del Sevilla, José María del Nido.

El vicepresidente del Sevilla, José Castro, explicó a los periodistas que "el sobrino de (Manuel Ruiz de) Lopera -Javier Páez, consejero bético- ha empujado al presidente, que no ha caído por las escaleras de milagro" y denunció que sus homólogos béticos "cambiaron de ubicación a la representación del Sevilla tres minutos antes del partido".

José María del Nidopasó por alto el presunto incidente pero le lanzó una andanada dialéctica al rival: "Prefiero no hablar de ese asunto. Sabemos dónde estamos y el estilo con el que nos tratan, puro estilo Betis. Prefiero no decir nada, pues afortunadamente estamos en otra guerra", dijo.

Por su parte, Óscar Arredondo, abogado del Betis y miembro de la Comisión que organiza el centenario, aseguraba que "quien ha sido insultado y agredido ha sido un consejero del Betis por parte del presidente del Sevilla", al que piensa "denunciar ante el Comité Antiviolencia y ante la Federación Española".

"He escuchado muchas mentiras. La verdad objetiva es que estos señores se han comportado de una forma lamentable. Protocolariamente es lo peor que he visto en mi vida. No han querido recoger un obsequio porque el busto de nuestro máximo accionista estaba allí y a partir de ahí se ha roto el protocolo. Ha sido todo nauseabundo", espetó.