Cuatro pilotos españolas buscan la gloria en la 41 edición del rally Dakar: Laia Sanz y Sara García compiten en motos y Rosa Romero y Cristina Gutiérrez, en coches. Ellas hacen que España sea el país más representado en cuanto a participación femenina de todo el Dakar, que en 2019 bate su récord de participantes femeninas. Las españolas ‘mandan’ por delante de Alemania, Holanda, República Checa y Perú, con dos representantes, y Bolivia, Francia, Italia, Paraguay y Rusia, con una.

Una de las caras más reconocibles es la de la motera de KTM Laia Sanz, que ha participado ocho veces en el rally más duro del mundo y siempre ha cruzado la línea de meta. En su trayectoria ha firmado un noveno puesto (2015) como mejor resultado, aunque este año el mero hecho de haber llegado a la línea de salida es todo un éxito para la piloto del Soficat Xerox, ya que unos problemas físicos le han hecho ser duda hasta mediados de diciembre.

Laia, que acumula 13 títulos mundiales de trial y cinco de enduro, ha reconocido que ha vivido algunos de los momentos más duros de su carrera para estar en la salida del Dakar. Ha tenido que superar una mononucleosis y una infección y no ha podido iniciar su preparación hasta hace solo unas semanas. Esto hace que su mayor desafío sea resistir las etapas largas, ya que su experiencia en la carrera pueda compensar la falta de entrenamiento de navegación.

La también motera Sara García se estrena en este rally y lo hace en la categoría Original, la más dura, ya que los competidores no reciben asistencia para reparar y hacer el mantenimiento de la moto en toda la carrera. Además, sólo pueden llevar los elementos básicos, como las herramientas o una tienda de campaña, en un baúl de 80 litros de capacidad que la organización traslada de un campamento a otro.

Prueba de su dureza es que solo 10 de los 16 participantes de la edición de 2018 completaron el raid. Si la piloto del Pont Grup Yamaha consigue terminar la carrera sería la primera mujer en lograrlo en esta categoría.

La zamorana llevaba años persiguiendo el sueño dakariano y para su debut ha decidido apostar a lo grande, aunque cuenta con una trayectoria que avala su ambición. Es ingeniera mecánica y cuenta con experiencia en el mundo de las dos ruedas, no en vano ha participado en grandes rallys y es campeona del mundo de Bajas y tricampeona de España de rally Todo Terrreno (2016, 2017 y 2018), entre otros triunfos.

A Perú también ha llegado la veterana motera Rosa Romero, aunque en esta ocasión cambia a las cuatro ruedas, categoría en la que competirá en el buggy Yamaha Yxz 1000r como copiloto de la italiana Camelia Liparoti, la mujer que más veces ha finalizado un Dakar al lograrlo en once ocasiones. De esta forma, Rosa y Camelia forman una de las dos únicas tripulaciones íntegramente femeninas que tomarán la salida el día de Reyes.

Las últimas participaciones de la catalana en el Dakar fueron en moto como miembro del equipo Himoinsa y había decidido no competir en esta edición. No obstante, tras recibir la llamada de Liparoti no dudó en emprender este nuevo reto y debutará en la categoría Side by Side (SxS) emulando a su marido, Nani Roma, dos veces ganador del Dakar, una en motos (2004) y otra en coches (2014).

En la línea de salida tampoco faltará la primera española en correr el Dakar en coches y en terminarlo. La burgalesa Cristina Gutiérrez hizo historia en 2017, repitió en 2018 y confía en finalizar en el top-25 en su tercera participación, ya que cuenta con más experiencia y un coche mejor, como es el prototipo fabricado por Sodicars del Mitsubishi Eclipse Cross de la categoría T1.2.

Es por ello que esta vez no se conforma con terminar. Fue 44ª en su debut y 38ª en su segunda participación y en 2019 ha dado un salto de calidad en cuanto a potencial y también espera darlo en la clasificación. En la línea de salida estará con Pablo Huete como copiloto y con “más ilusión y motivación que nunca”.