España busca este fin de semana el pase a la tercera final consecutiva de la Copa Davis y lo hace sin Rafa Nadal, su mejor tenista. Lo que para la gran mayoría de países sería un drama o motivo para prácticamente arrojar la toalla, en el equipo español se afronta como un desafío.

Desde que Nadal irrumpió de forma arrolladora en la élite del tenis mundial, allá por el año 2005, han sido varias las veces en las que España ha tenido que afrontar la baja del manacorense. El cansancio y las lesiones han hecho que el conjunto español tuviera que afrontar varias eliminatorias sin su número 1.

Sus ausencias siempre han provocado dudas, pero dos grandes gestas de los tenistas a la sombra de Nadal hacen que haya que creer siempre en ellos.

"Le vamos a sacar a Nadal los calzones del orto", gritaba micrófono en mano Juan Martín Del Potro ante el público argentino tras alcanzar la final de la Davis en 2008. Pero Nadal no fue por lesión. Y Argentina ya no tenía dudas de que la primera Ensaladera de su historia no se le podía escapar de las manos: en casa, sobre superficie dura y ante una España sin Nadal.

Nalbandián dio a los locales el primer punto tras tumbar al siempre combativo David Ferrer, el número 1 del equipo español. Lo más difícil parecía hecho. Pero antes apareció Feliciano López. Los saques y los zurdazos del toledano tumbaron a Del Potro en un épico partido y pusieron el empate.

En el dobles volvió a aparecer Feli, acompañado de Fernando Verdasco, para poner contra pronóstico en ventaja a España. La proeza estaba cerca. Fue el propio Verdasco el que dio el punto decisivo tras superar a Acasuso. Celebración por todo lo alto, gritos de 'Rafa, Rafa' de sus compañeros y reivindicación de que el tenis español era mucho más que Nadal.

Las lesiones no dejaron a Nadal disputar los cuartos de final de la Davis en 2011 y la victoria de España a domicilio ante Estados Unidos sin Rafa sonaba a quimera. Con el punto de dobles absolutamente inalcanzable (ante los Bryan, en casa y en su superficie), el equipo dirigido por Albert Costa debía lograr nada menos que tres puntos en individuales.

Feliciano López abría la eliminatoria ante Mardy Fish, jugador 23 puestos por encima suyo en el ranking. Y otra vez el toledano sacaba lo mejor de sí mismo en el momento más necesario y en el escenario más complicado. Cinco sets durísimos dieron el primer punto a España, que empezaba a creer que el sueño era posible cuando David Ferrer, en tres sets, se deshacía de Roddick ante su público.

La esperada derrota en dobles (pese a que Verdasco y Granollers plantaron cara y hasta ganaron el primer set) no bajó el ánimo de la 'Armada española'. David Ferrer no falló ante Fish y logró el pase de España a semifinales ante la incredulidad y la decepción del público norteamericano. Eliminar al país que más Davis tiene, en su propia casa y sin tu mejor jugador. Épico. Unos meses después, España se llevaría su quinta Ensaladera, segunda consecutiva.

Sin la épica de las dos anteriores eliminatorias, pero el equipo español superó otras muchas eliminatorias, eso sí con menos dificultad, sin contar con el concurso de Rafa.

Suiza (sin Federer) en 2007, Perú en 2008, Alemania e Israel en 2009, Suiza en 2010 (también sin Roger), y Kazajistán y Austria en 2012 fueron triunfos españoles a pesar de la baja de su mejor jugador.

Pero no siempre que Nadal ha causado baja, el equipo español ha dado la talla. En esta etapa gloriosa con cinco Copa Davis en el palmarés español, todas las eliminaciones han coincidido con la ausencia del balear.

En 2006, con el manacorense (ya era número 2 del mundo) de baja, España viajó a Bielorrusia y sufrió un batacazo inesperado más por la forma que por la derrota en sí. Un 4-1 contundente (con 3-0 inicial) ante un equipo cuyos tenistas (Max Mirnyi y Vladimir Voltchkov) no estaban al nivel tenístico de los españoles.

Un año después, Estados Unidos no dio ni la más mínima opción al combinado español. Blake y Roddick superaron en tres sets a Robredo y Verdasco, mientras que los Bryan sentenciaron sin apenas dificultades.

Pero quizás el capítulo que peor sabor de boca dejó fue en cuartos de final de 2010 en Francia. La conquista en Mar de Plata de la tercera Davis hizo llegar al equipo español con mucha moral, pero las derrotas de Ferrer ante Monfils y de Verdasco ante Llodrá complicaron en exceso las cosas. Feli y Verdasco cayeron en el dobles y los dos últimos intrascendentes partidos dejaron un feísimo 5-0 en el marcador.

La próxima batalla del equipo español sin Nadal, este fin de semana ante Estados Unidos. En casa, sobre tierra batida y con tenistas como David Ferrer y Nico Almagro España afronta el desafío con garantías suficientes para meterse en la final y buscar su tercera Ensaladera por tercera vez consecutiva.