Al menos nueve jugadores chilenos de la selección sub'20 han sido
detenidos por la policía canadiense al producirse enfrentamientos tras el partido que disputaron contra Argentina.
El partido -que se jugó en el Estadio Nacional de Fútbol de Toronto- terminó con la expulsión de dos jugadores chilenos y la victoria argentina por 3-0.
La televisión chilena, además, informó de que un dirigente que intentó defenderlos fue golpeado "salvajemente" por dos guardias de seguridad.
El periodista Pedro Carcuro de
Televisión Nacional relató que, tras el partido, los policías subieron al microbús que transportaba a los jugadores y bajaron a nueve de ellos esposados.
Afirmó también que todos los periodistas chilenos pudieron observar como le aplicaban
bastonazos eléctricos al jugador Isaías Peralta y después golpeado en el piso mientras permanecía casi inconsciente.
"No sabemos exactamente que originó la actitud de la policía pero desde nuestra posición, unos 50 metros de distancia, pudimos apreciar como
la policía atacó salvajemente a los jugadores", señaló en un despacho telefónico desde Toronto.
Añadió que los seleccionados fueron esposados y llevados al interior del recinto, sin que nadie de los periodistas o camarógrafos chilenos se les haya permitido filmar lo que estaba aconteciendo "y tememos por la seguridad de lo que puede estar ocurriendo con los jugadores que fueron llevados igual que unos criminales", añadió Carcuro.
Otro periodista lo corrobora En un nuevo despacho de Televisión Nacional, esta vez ya con imágenes recién editadas, se podía ver la máquina que iba a transportar los jugadores con los cristales rotos, producto de la desesperación de los jugadores por huir del interior del microbús ya que
los policías habrían lanzado en su interior al menos una bomba lacrimógena.
Otro periodista del canal estatal de la televisión chilena señaló que los policías "simplemente atacaron" a los jugadores cuando estos, nada más terminar el encuentro, corrieron al lugar donde se encontraban apostados los hinchas chilenos con el fin de saludarlos.
"Nosotros que estábamos al otro lado de la cancha pudimos observar como
los policías comenzaron a golpear brutalmente a los jugadores e incluso aplicaron bastonazos eléctricos a Peralta y Alexis Sánchez", señaló el profesional.
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