El Real Madrid recibe este martes (20.45 horas) al Ajax de Amsterdam en el partido que supondrá el regreso de la Liga de Campeones al Santiago Bernabéu, tras las polémicas semifinales de la temporada pasada ante el FC Barcelona, y en el que no estará el todavía sancionado José Mourinho.

El equipo afronta la segunda jornada de la fase de grupos presto a demostrar que la victoria ante el Rayo Vallecano ha supuesto el empuje que necesitaba para recuperar el paso. Aunque el 6-2 resultara excesivo para los méritos mostrados, la contundencia del resultado puede ser el mejor revulsivo para el grupo tras las dudas generadas en los últimos partidos, sobre todo en Valencia y Santander.

Además, tendrán otra ocasión de terminar de congraciarse con el madridismo tras las primeras dudas surgidas cuando el conjunto vallecano se adelantó en el marcador, aunque en esta ocasión José Mourinho no estará en el banquillo, ya que debe terminar de cumplir su suspensión.

El entrenador luso recibió el domingo el respaldo absoluto de su presidente ante la Asamblea, donde cualquiera de las, pocas, voces discordantes fue respondida con contundencia, por lo que el técnico sabe que en el club no hay duda alguna sobre él, aunque el equipo sí las generase.

Ante el Getafe, él mismo advirtió de que no le había gustado su equipo y en Zagreb, el 0-1, con gol de Ángel Di María, fue de lo poco salvable del partido, y el aviso de lo que vendría en las dos siguientes jornadas ligueras.

El Rayo Vallecano estuvo cerca de dar el susto, pero la capacidad de reacción y el 'set' anotado reforzó la autoestima de los blancos, que el martes deben dar un nuevo paso en la clasificación ante un rival al que la campaña pasada le endosaron también seis goles (2-0 y 0-4).