El Cádiz Aluminios Sotelo se ha convertido en solo un mes en el dominador absoluto del fútbol playa nacional. Ha ganado todos los títulos que se podían ganar. "Ahora mismo somos los mejores. Es indiscutible", asegura el capitán del equipo, Juan Carlos Martín. "Hemos sido un poco egoístas", reconoce con ironía y humor el presidente y entrenador del equipo, Manolo Sotelo.

El conjunto gaditano ganó la Liga el pasado fin de semana en Lloret de Mar (Girona). El anterior se proclamó campeón de España en Punta Umbría (Huelva). Uno antes, se impuso en el torneo regional de Andalucía, en su playa, la de la Victoria, y el fin de semana del ocho y del nueve de junio arrancó su mes del éxito con el título local de Cádiz. Cuatro títulos, en cuatro semanas. Imposible pedir más.

"Bueno, a mí me gustaría que sirviera para que se reconociera el trabajo de los chicos y se convocara a alguno más de nuestros jugadores para la selección andaluza o la española", lamenta Sotelo. "En septiembre se juega el Mundial de Haití y muchos se lo han merecido. Son los mejores y no van, mientras que otros, con más nombre, no hacen tanto y van", continúa.

"Claro que podría ir alguno más del equipo, pero no me quiero meter en decisiones técnicas. Siempre es difícil tener que elegir. La ilusión de llegar, la tienen, y van a luchar por ello. Yo ya no puedo por edad", dice Martín, el jugador más veterano del equipo, con 43 años.

Solo los gemelos gaditanos Torres, Cristian y Javi, las estrellas del equipo, han vestido la camiseta roja de la selección.

A diferencia de países como Italia, Rusia o Suiza, en cuyas ligas juegan profesionales, en España, los futbolistas del tetracampeón son amateurs. "Yo puedo aportar algo, pero no todo y los jugadores se han tenido que pagar algún gasto de desplazamiento o alojamiento", explica Manolo Sotelo, quien manda en el banquillo y en los despachos.

"Ya veremos cómo encontramos el dinero para ir el año que viene a la final de la Champions League. Será en Italia en abril y habrá jugadores de otros equipos que cobrarán 3.000 o 4.000 € por un torneo de cuatro días. Nosotros nos lo tendremos que pagar todo", pone de relieve el presidente-entrenador.

El capitán, Juan Carlos, responsable de almacén en la empresa cervecera Cruzcampo, comenta que "no es que no tengamos sueldo, es que tenemos que poner dinero, pero nos gusta mucho y lo hacemos porque queremos".  Tan unido está el equipo que "somos una familia, somos todos amigos. A los desplazamientos cercanos vamos con mujeres y niños", afirma orgulloso Sotelo.

Las dificultades económicas y practicar un deporte minoritario no han evitado que el club haya creado la Escuela Fútbol Playa Victoria, en Cádiz. En junio y julio realizan su tercer campus para 40 chicos de entre seis y 13 años. "Estamos creando cantera y base para el futuro. De hecho, los jugadores somos monitores en la escuela", destaca Juan Carlos Martín.