El jugador de los Giants de Nueva York y una de las estrellas de la NFL, Pláxico Burress, compareció ayer ante un tribunal de Manhattan donde se enfrenta a cargos de posesión de ilegal de armas.
Todo ha venido causado por un incidente que protagonizó en la madrugada del sábado en una discoteca de Nueva York cuando intentaba entrar en ella con una pistola cargada. Allí, el jugador se disparó por accidente en su pie derecho cuando intentaba manipular el arma para descargarla.
Tras entregarse e ir al calabozo, ahora se enfrenta a un posible delito de posesión ilegal de armas, que en Nueva York está penado hasta con siete años de prisión.
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