Una de las candidatas a ganar el Mundial, la Bélgica de Roberto Martínez, se estrenó en el torneo y no dio opción a la sorpresa. Se impuso con comodidad a una Panamá que salió goleada (3-0) del primer partido de su historia en una Copa del Mundo.

El conjunto centroeuropeo salió trepidante y decidido a imponer su mayor calidad. Los canaleros, de inicio abrumados por la velocidad impuesta por los Diablos Rojos de la mano de su líder, Eden Hazard, sólo pudieron resguardarse en torno al portero Penedo, su mejor hombre y que detuvo el primer acercamiento de Mertens.

Los de Martínez dominaban sin problemas y apenas dejaban salir a la debutante que cerca estuvo de ‘regalar’ el 1-0 tras una mala cesión de Román Torres que Hazard no supo aprovechar. El central se desquitó de este fallo metiendo un pie salvador a un balón al que se disponía rematar sin oposición Lukaku.

Pero a partir de ahí, los de Bolillo Gómez se fueron asentando en el terreno de juego. Las faltas fueron otro recurso de los panameños para frenar el ritmo belga, donde De Bruyne y Mertens se unían a su Hazard para llevar un peligro que fue decayendo hasta un arreón final donde el jugador del Chelsea volvió a probar al meta rival.

Sin embargo, todo el planteamiento se le fue abajo a Panamá tras el descanso. Mertens cazó nada más reanudarse el partido una volea dentro del área que superó a Peneda y puso el primer tanto en el marcador.

El golpe despertó un tanto al conjunto canalero, que gozó de su mejor ocasión poco después, pero Blas Pérez no acertó ante Courtois.

El Bolillo Gómez intentó dotar de más poderío ofensivo a los suyos con la entrada de Gabriel Torres y de Ismael Díaz, jugador del Fabril, pero Bélgica golpeó de nuevo y finiquitó el partido antes de aumentar el suspense. Un pase de exterior de De Bruyne fue cabeceado a la red por Lukaku.

El delantero del Manchester United fue también el encargado de cerrar la goleada tras una contra iniciada por Hazard; el jugador blue filtró un preciso pase para que Lukaku, ganándole la espalda a Escobar, picase el balón al meta canalero. Ya en el descuento, el cuadro sudamericano estuvo a punto de sorprender a Courtois con un disparo desde su propio campo.