La selección de Noruega, actual campeona olímpica, tratará de coronarse por tercera vez en su historia, la segunda de manera consecutiva (tras su éxito en Brasil 2011), campeona en el Mundial femenino que arranca este viernes en Serbia. Un reto en el que tratarán de hacer fracasar a las noruegas, las grandes dominadoras del balonmano femenino mundial en los últimos años, selecciones como Montenegro (la vigente campeona de Europa), Hungría, Francia Dinamarca o Corea del Sur. Terna de aspirantes en la que también figuran el equipo español, bronce en el Mundial de Brasil 2011 y en los Juegos Olímpicos de Londres, o Brasil, que parece en disposición de pelear por las medallas, tras su formidable progresión en los últimos años. España llega tras ganar el Cuatro Naciones. Una buena señal.

Un Campeonato del Mundo en el que además de españolas y brasileñas participarán las selecciones de Argentina, Paraguay y República Dominica, si bien ninguna de ellas parte, a priori, con opciones de pelear por las posiciones de privilegio. Precisamente Noruega será el primer rival de la selección española en la competición, en las que nórdicas y españolas parten junto con Polonia como la grandes favoritas para ocupar la primera plaza del grupo C que completan Argentina, Paraguay y Angola. Una primera plaza que tendrá como premio evitar previsiblemente en los octavos de final a selecciones de la talla de Hungría, Rumanía o Alemania, que se perfilan como las máxima candidatas para ocupar las primeras plazas del grupo D.

Por su parte, Brasil, quinta en el Mundial que organizó hace dos años y cuartofinalista en los Juegos de Londres, peleará con Dinamarca y Serbia por el primer puesto del grupo B en el que también figuran los equipos de Japón, China y Argelia. Primer puesto que permitirá evitar presumiblemente en octavos de final a selecciones como Montenegro, Francia o la emergente Holanda, que dejó fuera de la cita mundialista a la triple campeona mundial, Rusia. Unos octavos de final a los que difícilmente tendrá acceso la República Dominicana que se medirá en la primera fase en el grupo A con montenegrinas, francesas y holandesas, así como con Corea del Sur, cuarta en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, y la República Democrática del Congo.

"La presión es la que se está generando a nivel de prensa. Este equipo ha jugado muchas veces con presión y mayor que la que teníamos en el Mundial de Brasil no la vamos a tener porque nos jugábamos jugar un Preolímpico que nos abría las puertas de los Juegos. Allí hubo más presión, aunque no tanto a nivel externo, sí a nivel interno por querer estar en los Juegos", asegura Jorge Dueñas, el seleccionador español. Este Mundial servirá para la despedida internacional de la pivote Begoña Fernández, otra jugadora vital en este tiempo. "Tomó la decisión de dejarlo después de este campeonato y ha hecho un esfuerzo importante para llegar aquí. Para ella es bueno despedirse en una gran competición y lo único que nos gustaría es que tuviese una despedida brillante con la selección", afirmó el bilbaíno.

Grupo A (Belgrado): Montenegro, Holanda,  Congo, Corea del Sur,  Francia, República Dominicana.

Grupo B (Nis): Dinamarca, Brasil, Serbia, Japón, China, Argelia.

Grupo C (Zrenjanin): Noruega, Polonia, España, Angola, Argentina, Paraguay.

Grupo D (Novi Sad):  Hungría, Alemania, Rumanía, República Checa,  Túnez, Australia.