El equipo maño ha sido capaz, en su primera participación europea, de meterse en la final en la que le espera el vencedor de la eliminatoria entre el Magdeburgo alemán y el Grasshopper suizo.

Sin embargo, el conjunto que entrena el sueco de origen serbio Veroljub Kosovac tuvo que sufrir porque después de completar una excelente primera mitad pagó el desgaste físico tras el descanso y estuvo muy cerca de no poder superar la ventaja de los daneses.

El equipo aragonés salió muy centrado al terreno de juego y con una excelente defensa 6-0 impedía los pases al pivote de los daneses, principal argumento ofensivo de su rival.

Además, en ataque se mostraba muy suelto y superaba la profundidad del 5-1 visitante que en algunos momentos era 3-2-1 para igualar ya la desventaja de la ida en el minuto 7 (6-2).

El conjunto nórdico echaba de menos a su mejor goleador, Lars Moller Madsen, lesionado, y sufría en ataque ante un CAI que era un valladar y que gracias a su buena defensa podía correr el contragolpe.

Hasta en seis ocasiones el conjunto maño marcó a la contra en este primer periodo, lo que le permitió obtener la máxima renta, siete goles (14-7), en el minuto 24 aunque al final de este tiempo el Skjern fue capaz de bajarla hasta los cinco tantos, que dejaba la eliminatoria en el alero.

Tras el descanso, máxima diferencia

Tras el descanso el equipo aragonés llegó a alcanzar la máxima diferencia de todo el encuentro, ocho goles (20-12) en el minuto 35, pero a partir de ahí perdió la contundencia defensiva que había exhibido en el primer periodo y la frescura en ataque y fue la gran actuación del guardameta esloveno Beno Lapajne, la que, con sus grandes intervenciones, mantuvo al equipo por delante en la eliminatoria.

Del 20-12 se pasó al 23-20 en apenas doce minutos, lo que suponía que, por primera vez en el encuentro, el equipo nórdico era el que estaba en la final.

Los nervios afloraron en el equipo naranja que flojeaba en defensa y tenía muchos problemas ofensivamente porque Dalibor Doder, su conductor del juego y hombre decisivo en ataque en los primeros veinte minutos, estaba sentado en el banquillo.

Sin embargo, las paradas de Lapajne y los penaltis marcados por Hussein Alí Zaky sostenían a los maños manteniendo una renta de cuatro o cinco goles que hacía prever un final de infarto.

Con 26-21 a falta de cinco minutos el CAI BM Aragón supo endosarle un 0-2 al Skjern jugando en inferioridad y llegó a los siete tantos de renta que prácticamente le aseguraban la final.

La reacción a la desesperada del equipo foráneo acortó distancias hasta el 29-24 marcado prácticamente sobre la bocina pero no pudo poner la eliminatoria a su favor.

29 - CAI BM Aragón (16+13): Lapajne; Prendes (3), Mariano Ortega (2), Rivera (2), Cartón (5), Zaky (6,3p), Doder (3), Sorli (3), Sorrentino (2), Ibai Cano (1), Víctor Alvarez (-) y Arrhenius (2).

25 - Skjern (11+14): Agerschou (Andersen, p.s.); Johannsson (1), Riber (2), Jensen (5,2p), Mathiasen (4), Bluhme (2), Svavarsson (4), Westerrholm (4), Halldorsson (1), Kristensen (2) y Jorgensen (-).

Arbitros: Lovric y Petkovic (Croacia). Excluyeron por dos minutos al local Vatne (2 veces) y a los visitantes Westerrholm, Johannsson, Halldorsson, Riber y Mathiasen.

Incidencias: partido de vuelta de las semifinales de la Copa EHF disputado en el pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza ante unos 7.500 espectadores.

Marcador cada cinco minutos: 3-2; 7-3; 10-5; 11-6; 14-7; 16-11 -descanso- 20-12; 21-15; 21-17; 24-20; 25-21; 29-24.