La selección española sub-18 batió  a Rumanía contundentemente por 95-46 en su primer encuentro del campeonato europeo júnior de Madrid, en el que destacaron el base Ricky Rubio, el ala-pívot Sergio de la Fuente y el alero Pere Tomás.

Aunque no hay que olvidar al resto de la plantilla, porque si algo distingue al conjunto del técnico Luis Guil es el trabajo en equipo y éste sólo se logra con las fuerzas y la colaboración de todos.

A pesar de los típicos nervios que afloran a un equipo al disputar un encuentro en casa e inaugurar una competición, el combinado de Luis Guil no mostró ni un titubeo en la pista y sí su habilidad y superioridad frente al conjunto rumano.

El combinado nacional aseguró el tiro ya en el primer parcial, que aunque no fue el primero en avanzar en el marcador, pronto llegó Rubio para tomar las riendas del encuentro y frenar a los rumanos, acabando el primer parcial con un 24-13 en el marcador.

El segundo cuarto fue para los rojos. José Antonio Marcó abrió la veda con un triple y Sergio de la Fuente se anotó 15 tantos consiguiendo una renta de 39-13 que alarmó al técnico rumano teniendo que detener el partido. Pero de poco sirvió porque España estuvo acertada y acabó distanciando el marcador hasta el 52-23 que acompañó al descanso.

Estilo propio 

El estilo de juego del seleccionador nacional júnior se vio en el transcurso de todo el encuentro. Los jugadores de Luis Guil supieron desplegarse por todo el campo, situación que facilitó la rapidez en el terreno de juego, con un número elevado de posesiones y, como consecuencia, la renta siempre iba a la alza. De esta manera y aplicando la máxima de Guil: "hay que jugar divirtiéndose", los españoles lograron marcar una diferencia abismal en el juego, que nada tenía que ver con el de Rumanía.

La intensidad, el sacrificio y el esfuerzo fueron los valores que construyeron la imagen que dejó ver la sub-18 española en la cancha de Telefónica Arena Madrid.

Los de Luis Guil siguieron con su tónica en la reanudación y la renta no hizo más que aumentar. España se encontraba ya a 40 puntos de ventaja sobre el rival y llegó al final del tercer cuarto con un 33-73 en el luminoso.

Rozando la victoria, los locales salieron a rematar el partido recreándose con su buen juego. Por parte rumana, únicamente Urichianu fue capaz de anotar los últimos puntos de su conjunto.

Un 95-46 fue la recompensa que obtuvo España después de 40 minutos de trabajo a un elevado ritmo. Resultado que permitirá a los de Luis Guil un voto de motivación para afrontar el partido de mañana, sábado, con otra de las selecciones favoritas, junto a Serbia, para lograr la medalla.

- Ficha técnica

95. España (24+28+21+20): Pere Tomás (17), Ricky Rubio (16), Xavi Rabaseda (7), Óscar Raya (10), Pablo Aguilar (8) -quinteto inicial-, Orlando Camin (3), José Antonio Marco (6), Jorge Santana (2), Luis Parejo (2), Raimundo López (2), Sergio de la Fuente (17), Pablo Almazán (5).

46. Rumanía (13+10+9+14): A. Negut (3), A. Bercean (11), M. Urichianu (16), A. Vlad (5), M. Daian (4) -quinteto inicial-, S. Faur (5), G. Scurtu (-), V. Taschiná (-), H. Codin (2), A. Epure (-), R. Antal (-), I. Orbeanu (-).