Los porteros de la Liga ya se pueden ir preparando porque la próxima temporada, que arranca el 29 de agosto, se enfrentarán al balón más rápido de la historia del fútbol, el Nike T90 Ascente, que será un 8% más rápido que los modelos convencionales. La clave de su velocidad está en un diseño basado en la tecnología de la Fórmula 1 y en un proceso de fabricación supervisado por el ex ingeniero de Ferrari Joan Villadelprat.

"Cuando me dijeron que querían meter un balón de fútbol en el túnel de viento pensé que era una broma. ¡Está pensado para meter un monoplaza!", recuerda Villadelprat, que prestó sus instalaciones del equipo Epsilon-Euskadi, en Vitoria, para someter al balón a todo tipo de pruebas aerodinámicas.

En el túnel de viento se estudió la resistencia al aire de la pelota aplicando un viento constante de 90 km/h, más o menos el disparo medio de un futbolista. Se consiguió que su resistencia fuera de sólo 0,277 gramos (el último modelo ofrecía 0,318) y se eliminaron las turbulencias para que no genere efectos extraños cuando es golpeado.

Una bola de golf gigante

Para la fabricación del T90 Ascente se utilizaron 20 materiales y todos los paneles que forman su capa exterior tienen la misma presión, logrando un movimiento idéntico independientemente del punto donde se produzca el disparo.

La capa exterior del balón también presenta una textura porosa, que recuerda a la de una pelota de golf. Su finalidad es mejorar el agarre y ayudará a los porteros a contrarrestar su alta velocidad.

"Lo he probado y es más fácil de atrapar tanto en mojado como en seco gracias a esos pequeños agujeritos", explica el portero del Barça, Víctor Valdés.

Otro elemento que ayudará tanto a porteros como a jugadores es su dibujo y color, que mejora notablemente su visualización dentro del campo, especialmente cuando está en movimiento. ¡Sólo falta que empiece a rodar!

Pero hay bolas más rápidas

El nuevo balón de la Liga no podrá competir en velocidad con las pelotas de otros deportes como el golf, donde Sergio García es capaz de lanzar la bola a 268 km/h.

El tenista Andy Roddick firmó un saque de 250 km/h y las pelotas de béisbol han llegado a superar los 170 km/h.

El balón de fútbol que alcanzó mayor velocidad 'sólo' rozó los 140 km/h después de un disparo del ex madridista Roberto Carlos.

Balones míticos