El Atlético volverá a jugar la final de la Europa League, competición que ganó por última vez en 2012, tras deshacerse este jueves del Arsenal en el Wanda Metropolitano. La eliminatoria llegó completamente abierta al Wanda Metropolitano después del 1-1 de Londres, pero un gol de Diego Costa (1-0) cerró el billete rojiblanco para Lyon.

El equipo de Simeone, que vio el partido desde la grada por su expulsión en la ida, salió dispuesto a intentar resolverla cuanto antes. Mucho más incisivo que en el partido de ida, el Atlético creó las primeras ocasiones, una de ellas muy clara a los siete minutos cuando Diego Costa se plantó solo ante Ospina, pero el hispanobrasileño no pudo superar al portero colombiano del Arsenal. Poco después, el central de los gunners Koscielny se lesionó aparentemente de gravedad y se marchó en camilla entre lágrimas para ceder su puesto a Chambers.

Pero aunque el partido había empezado regular para el Arsenal, poco a poco el equipo de Arsene Wenger se fue acomodando en el Metropolitano y empezó a buscar a Oblak. Lacazette llevó peligro al área del esloveno y también las galopadas deMonreal y Bellerín por las bandas.

Las fuerzas se igualaron en el césped hasta que en los últimos minutos del primer tiempo el Atlético apretó el acelerador y volvió a imponer su dominio. Koke acarició el palo de Ospina con un disparo desde la frontal y Griezmann, a la media vuelta, también disparó rozando el poste. El gol colchonero se barruntaba en la grada y llegó cumplido el tiempo reglamentario, un tanto psicológico justo antes de que el árbitro señalara el descanso. Griezmann vio el hueco y metió un pase en profundidad para Costa, que esta vez sí resolvió con acierto por encima de Ospina.

En la segunda mitad, el Arsenal se lanzó al ataque, no le quedaba otra, y llegó con peligro al área de Oblak, tan acertado como Godín a la hora de solucionar problemas. El Atlético, eso sí, respondió al contragolpe y también tuvo muy buenas ocasiones para sentenciar la eliminatoria. Fue una segunda mitad de ida y vuelta, de mucho desgaste físico, que acabó pasando factura a los ingleses porque el Atlético terminó el partido más entero. Salvo Diego Costa, que tuvo que ser sustituido por Fernando Torres al sufrir molestias musculares. El Atlético buscará el próximo día 16 en Lyon su tercer título de Europa League.