La Organización Impulsora de Discapacitados (OID) ha denunciado al Olympique de Marsella ante la UEFA por la conducta de unos presuntos discapacitados, aficionados de este equipo, en el partido disputado el pasado 1 de octubre contra el Atlético de Madrid en el Vicente Calderón y por el que se ha sancionado con la clausura del estadio rojiblanco en tres partidos, aunque el Liverpool podrá jugar en él el miércoles.

El abogado de la organización, Javier Gallego, explicó que la denuncia se interpuso después de que la OID haya tenido conocimiento de que los "supuestos" discapacitados franceses se levantaban de sus sillas con la única intención de provocar a los aficionados locales tras la consecución de un gol del equipo francés.

"La situación de estos supuestos discapacitados en el campo con respecto a la visibilidad del partido era inmejorable, a un lado tras una de las porterías del campo donde, en todo partido, se sitúan todos los seguidores discapacitados que quieren presenciar un partido de fútbol en el Vicente Calderón, sin que ninguno haya presentado queja alguna al respecto", señaló el letrado.

Según Gallego, las provocaciones de estos supuestos impedidos físicos dieron lugar a que "miembros de la seguridad del estadio decidieron cambiar la ubicación de los mismos por cuestiones estrictamente de seguridad ante una situación que ellos mismos habían provocado".

Por ello, la OID denuncia ante la UEFA el comportamiento de los aficionados del equipo francés con la finalidad de "erradicar la violencia de los campos de fútbol y conseguir que "el buen nombre del Atlético de Madrid no se vea mancillado por unas acciones ajenas al club y a los seguidores del mismo".