La victoria de Argentina sobre Francia en la final del Mundial de Qatar dejó imágenes de la celebración de los futbolistas de la Albiceleste que levantaron ampollas en la selección gala. Una de las más comentadas fue la del 'Dibu' Martínez cargando un muñeco con el rostro de Kylian Mbappé, al que había consolado tras la tanda de penaltis, durante la rúa de los campeones del mundo en su país. Ahora, el futbolista del París Saint-Germain se ha pronunciado al respecto tras la vuelta de su equipo a la Ligue 1.

Preguntado en zona mixta sobre si había vuelto a hablar con Leo Messi, después del continuo run-run de futuros problemas en el conjunto francés tras el triunfo de 'La Pulga' y la derrota del crack francés, el ganador de la Bota de Oro en la Copa del Mundo explicó que había hablado con él tras la conclusión del encuentro y "le felicité", ya que es un momento único en la vida de un jugador que ambos querían alcanzar. "Hay que ser buen jugador", señaló.

"La celebración no es mi problema", apuntó tras ser cuestionado también por el polémico festejo, ante lo que el '7' del PSG fue muy claro: "No hay que gastar energía en cosas inútiles", dijo elegantemente para dar por zanjado el tema.

El astro francés fue fundamental en la sufrida victoria de su equipo en su regreso a la Ligue 1 tras la cita mundialista. Con empate a uno en el marcador, el París Saint-Germain vio como uno de sus mejores jugadores, Neymar, se marchaba al vestuario expulsado con más de media hora aún por disputar.

Mbappé demostró sobre la bocina que no había por qué preocuparse con la ausencia de Neymar, porque sobre el césped del Parque de los Príncipes todavía estaba él. Cuando el Strasbourg casi celebraba el punto sacado ante el líder de la liga francesa, el galo se internó en el área y provocó un penalti, que él mismo se encargó de anotar, y dio el triunfo a los parisinos.