El primer Mundial de fútbol en un país árabe está teniendo unos inesperados protagonistas animales. Es sabido que el gato es el animal favorito en los países de tradición musulmana, muy por encima del perro, y esto hace que muchas veces campen a sus anchas por las calles con una inusitada confianza en las personas, que suelen tratarles con cariño.

Esta actitud desenvuelta y el ya conocido encanto que desprenden estos pequeños felinos ha terminado por enamorar a dos de los jugadores de la selección inglesa que se han llevado a un gato callejero con ellos al Reino Unido tras su eliminación de este sábado.

El minino callejero fue adoptado por los defensas ingleses Kyle Walker y John Stones durante las cuatro semanas en las que estuvieron concentrados en la ciudad de Al Wakrah y fue bautizado como Dave. 

Aunque la idea expresada por Walker era que el gato Dave viajara con ellos de vuelta a Inglaterra si su selección lograba vencer el campeonato, la eliminación en cuartos contra Francia no ha cambiado el plan. Los medios ingleses, siempre amigos de los juegos de palabras, hablan de mundial de Cat-ar (cat es gato en inglés).

El gato fue trasladado a un veterinario local para pasar todos los controles y recibir las vacunas necesarias y ahora tendrá que pasar una cuarentena de cuatro meses antes de viajar, presumiblemente, a Mánchester, donde los dos defensas viven, defendiendo los colores del Manchester City.

"Simplemente estaba allí un día así que lo adoptamos", explicó Walker en el canal oficial de la federación inglesa. "Dave es bienvenido a la mesa, a algunos no les gusta el gato, pero yo le quiero".

El gesto brusco con un gato en la rueda de prensa de Vinícius que ha provocado críticas en las redes

El gato Dave no ha sido el único en lograr robar protagonismo a las estrellas del fútbol internacional durante este inusual Mundial invernal. En la rueda de prensa previa a la eliminación de Brasil frente a Croacia, un gato irrumpió en la sala y se sentó tranquilamente junto al delantero del Real Madrid Vinicius Junior. 

Un miembro del equipo técnico, que estaba sentado junto a Vinicius, agarró al gato y lo lanzó fuera de la mesa, despertando críticas en las redes sociales en un país en el que el respeto y cariño por estos animales es el común denominador.