Rafa Nadal regresó a la competición oficial casi dos meses después de caer eliminado en el US Open con una dura derrota en la pista dura de París-Bercy.  Su verdugo, Tommy Paul, quien cuajó una gran remontada (3-6/7-5(4)/6-1) ante un Nadal que mostró gestos de malestar en el tramo final del partido. El americano, el mismo que apeó a Roberto Bautista en la primera ronda, se medirá en octavos a Pablo Carreño.

El español comenzó algo dubitativo, y aunque se hizo con su primer servicio, el break no tardó en llegar, pues al primer cambio de pista dominaba el número 31 del circuito. Tommy Paul estaba realmente inspirado, sobrepasando a Nadal en sus subidas a pista con bolas muy ajustadas y mandando desde el fondo con golpes muy potentes, pero de pronto se apagó. Nadal recuperó la rotura y sacó su mejor nivel para parar el contador de Paul y llevarse el primero por 6-3.

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La bajada de nivel de Paul se prolongó en el segundo set, y el de manacor llegó al cambio de pista mandando en el marcador por 2-1, replicando a la inversa la dinámica de la primera manga. Aunque también haría lo propio Paul consiguiendo darle la vuelta para continuar liderando el juego con el servicio. Nadal, sufriendo en sus servicios, llevó el set al tie-break, pero Tommy Paul forzó la tercera manga.

Nadal empezó con muchos problemas el tercero, con un 2-0 en contra muy complicado de remontar dadas las sensaciones que demostraba en pista el balear. Paul no frenó la marcha en ningún momento y, a excepción del juego logrado por Rafa en su segundo turno de saque (2-1), se anotó de corrido todos los restantes para eliminar al número dos del mundo a las primeras de cambio.

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Lo peor de la derrota, las sensaciones, pues la cara del balear reflejó una mueca de preocupación desde el arranque de la tercera manga hasta el tramo final de la misma, cuando el gesto se tornó en uno de malestar. De hecho, en el último cambio de pista estuvo casi un minuto con la mirada perdida, y en la reanudación la sensación que mostró con su juego era la del deseo que de que partido llegara a su fin por la vía rápida.