Carlos Alcaraz tuvo pocos miramientos con Pablo Carreño en el duelo español en los cuartos de final del torneo ATP 500 de Basilea. En menos de dos horas el murciano se impuso al asturiano por 6-3 y 6-4 en un partido que, salvo por momentos puntuales, controló bastante bien. La clave para Alcaraz estuvo en su saque, con el que apenas cedió terreno. No ocurrió lo mismo con Carreño: el gijonés vio como se le iba el encuentro con dos roturas de su servicio en momentos clave.

Serán las primeras semifinales para el tenista de El Palmar desde que se instaló en la cima del circuito tras ganar el Abierto de Estados Unidos, el quinto título en lo que va de año para el murciano junto a los Masters 1000 de Madrid y Miami y los torneos de Barcelona y Río de Janeiro. Completa su palmarés con el de Umag, el pasado año, el primero de su carrera.

Tardó una hora y 41 minutos Alcaraz en sacar adelante el duelo con Carreño, campeón esta temporada del Masters 1000 de Canadá, su séptimo trofeo y su mayor éxito junto al bronce olímpico en Tokio 2020.

Mantuvo un trayecto impecable en el primer set el número uno que rompió el saque de Carreño en el cuarto juego, mantuvo el desequilibrio y adquirió la ventaja en el marcador. Empezó mejor la siguiente manga para Alcaraz porque se situó con 2-0 pero su rival reaccionó y en el cuarto rompió el servicio del murciano por primera vez y consiguió equilibrar la situación. Pero el gran favorito consiguió un nuevo break en el momento justo, en el noveno juego. Se puso con 5-4 y consolidó a continuación para cerrar el triunfo y acercarse al título.

Carlos Alcaraz se enfrentará en semifinales con el canadiense Felix Auger Aliassime, tercer cabeza de serie y uno de los jugadores más en forma del momento. El campeón en las últimas semanas en Florencia y Amberes, que lleva once victorias seguidas, batió al uzbeko Alexander Bublik por 6-2 y 6-3.