CLAVES

Un infarto, un desfibrilador al vuelo, la rapidez del árbitro y minutos de angustia: así fue el suceso que mantuvo en vilo el Cádiz - Barça

El centrocampista del Cádiz CF, José Mari transporta una camilla hacia la grada donde se encuentra un aficionado que ha sufrido un infarto, durante el partido de LaLiga que enfrentaba al Cádiz y al Barcelona.
El centrocampista del Cádiz CF, José Mari transporta una camilla hacia la grada donde se encuentra un aficionado que ha sufrido un infarto.
Román Ríos / EFE
El centrocampista del Cádiz CF, José Mari transporta una camilla hacia la grada donde se encuentra un aficionado que ha sufrido un infarto, durante el partido de LaLiga que enfrentaba al Cádiz y al Barcelona.
El centrocampista del Cádiz CF, José Mari transporta una camilla hacia la grada donde se encuentra un aficionado que ha sufrido un infarto.
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Transcurría el minuto 82 del partido cuando el árbitro del Cádiz - Barcelona (0-4), Del Cerro Grande, detectó que algo no iba bien en las gradas del Nuevo Mirandilla. Así lo relata en el acta del partido el colegiado que, gracias a su rápida actuación, pudo facilitar la asistencia médica y la posterior reanimación de un hombre que estaba sufriendo un problema cardiaco.

El relato de Del Cerro Grande quedó recogido de esta manera en el acta: "En el minuto 36:10 de la segunda parte nos percatamos de que, en el fondo de la derecha, según se sale de vestuarios, un espectador estaba sufriendo un problema de salud severo, por lo que decidí interrumpir el partido para que todos los medios sanitarios en el estadio pudieran realizar las actuaciones necesarias con dicha persona. Pasados unos minutos, y viendo que la situación no evolucionaba, ordené el abandono de jugadores y entrenadores a sus vestuarios, a la espera de la evolución de la situación".

Fueron minutos de mucha tensión. La rápida actuación del colegiado permitió la reacción por parte de todos en el estadio. El protocolo establecido con la Cruz Roja entró rápidamente en funcionamiento y comenzaron la asistencia en el paro cardíaco. El banquillo del Barcelona también entregó un segundo desfibrilador al guardameta Ledesma para que, corriendo, pudiera hacérselo llegar a la grada, lanzándolo a la zona donde se encontraba el hombre afectado.

Posteriormente y tras recibir noticias de que el hombre había sido trasladado a un centro hospitalario tras ser reanimado, el colegiado mantuvo una reunión con delegados, entrenadores y capitanes de ambos equipos y todos se mostraron conformes en continuar, por lo que se pudo concluir sin ninguna incidencia más.

El Cádiz ha informado esta madrugada en un comunicado de que el hombre fue trasladado consciente a la UCI del Hospital Puerta del Mar donde "permanece ingresado".

Otra desvanecimiento

No fue el único susto de la noche, ya que uno de los operadores de cámara de Tribuna sufrió un desvanecimiento del que también fue rápidamente atendido por el cuerpo médico del estadio "sin mayores consecuencias"., según informa el club.

"La entidad (Cádiz C.F.) quiere agradecer el comportamiento ejemplar de los aficionados de fondo sur ante esta situación, al igual que a los miembros de seguridad y Cruz Roja por su rápida actuación para que esta incidencia tuviera final feliz", concluye el comunicado.

Xavi: "La vida de un ser humano está por encima del fútbol"

Por su parte, el entrenador del FC Barcelona, Xavi Hernández, celebró que no hubiera ocurrido ninguna desgracia y que "la vida de una ser humano está por encima del fútbol".

"Nos llegaban informaciones... Al final se ha podido reanimar y el fútbol está por debajo de cualquier ser humano. Las tres partes estábamos de acuerdo con reanudar el partido. Es una situación atípica, es una vida humana y tenemos que estar por encima de todo esto. Le deseamos que se recupere lo antes posible", explicó.

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