Los incidentes en los aledaños del Stade de France, donde se disputa la final de la Champions League, con motivo del retraso en la apertura de varias puertas de acceso al recinto han desembocado diferentes altercados. La Policía ha intentado disolver alguno de ellos con el uso de gas pimienta y el resultado ha sido vergonzoso.

Varios vídeos publicados en redes sociales dejan en evidencia la intervención de la Policía francesa que intentó evitar que varios aficionados entrasen en el estadio saltando la valla que lo rodea mediante el uso del gas pimienta. Una medida desproporcionada cuando una de sus consecuencias es dañar a viandantes, mujeres, niños e incluso miembros del cuerpo de policía.

Una de las imágenes que más críticas ha provocado ha sido la de un niño con la camiseta de la selección francesa totalmente desorientado y buscando a su madre, a la que termina encontrando con la ayuda de varios agentes que trataban de poner paz en la zona.

Caos en la entrada de aficionados del Liverpool que ha retrasado el comienzo de la final: saltos de valla, gente atrapada en las puertas...

Precisamente otro vídeo muestra a un policía frotándose los ojos y vomitando por los efectos del gas pimienta utilizado por sus propios compañeros.