La histórica noche que vivió el Santiago Bernabéu comenzó con el empate de Karim Benzema, que dejó retratado a Donnarumma. El portero italiano se fue al suelo al intentar despejar el balón ante la presión del atacante blanco, que cedió a Vinícius para poder desmarcarse y colocarse en posición franca para marcar.

Al-Khelaifi la lía al final del partido: bajó pegando voces y dando golpes buscando el vestuario de los árbitros

El tanto que abrió la épica clasificación del equipo madridista generó un enorme enfado en Nasser Al-Khelaifi. El presidente del PSG bajó a los vestuarios hecho una furia, con intención de ir a pedir explicaciones al árbitro, el neerlandés Daniel Makkelie, incluso con amenazas. "¡Te voy a matar!", se le escuchó decir por los pasillos interiores.

El motivo del enfado del dirigente catarí y de Leonardo, el director deportivo del club, es que consideran que ese gol debió ser anulado. Benzema frenó el intento de despeje de Donnarumma con un golpe que, según el colegiado, no fue suficiente para ser considerado falta. Para los madridistas (y para el árbitro) fue carga legal; para sus detractores, una infracción que no se pitó.

En el vídeo viral en el que se ve el claro contacto de la pierna de Benzema sobre la cadera de Donnarumma no se observa lo que pasó instantes antes. El portero italiano realizó un control muy malo, que propició que el '9' blanco se atreviese a encimarle para intentar robarle el balón como, finalmente, ocurrió.

La lección de fútbol de Benzema y Modric: la veteranía de dos genios regala al Madrid otra histórica noche en Europa

El meta del PSG había estado relativamente bien durante todo el partido, pero en cuanto la conexión entre Benzema y sus compañeros funcionó (clave fueron los cambios de Ancelotti, quitando a un inane Asensio) y en cuanto Modric y el galo se desataron, la remontada y otra noche histórica fue posible. 

Esta vez, no habrá quejas sobre los árbitros del lado madridista, que ya en la previa se temían que Makkelie tendría que entrar en la lista de señalados como Aytekin, Ovrebo y demás colegiados con dudosas actuaciones en la Champions.