Con mucho sufrimiento y muchísimas dudas en su juego, pero el Real Madrid salvó su compromiso ante el Granada y se pone más líder de la Liga, con su ventaja ampliada ahora a seis puntos. El héroe del día fue Marco Asensio, eternamente criticado y que este domingo sacó a relucir su poderosa zurda para dar la victoria a los blancos.

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Sin Benzema ni tampoco Vinícius, Ancelotti prefirió jugar de nuevo con la figura del falso nueve, esta vez siendo Isco el elegido. Jovic en el banquillo, y también Bale o Hazard, que queda claro que no cuentan con la confianza del técnico italiano.

Sin una referencia arriba y con Asensio y Rodrygo desaparecidos, al Real Madrid le costaba generar ocasiones y solo llegaba a través de pequeños chispazos. Además, el Granada mostró pronto sus armas en una rápida contra finalizada por Puertas, que le ganó la espalda a Marcelo y obligó a Courtois a realizar una buena parada.

El Madrid vivía de chispazos de talento. Un gran pase de Kroos, lo recogió Carvajal en la banda y su centro lo tocó Neva, estrellándose el esférico en el larguero. Poco después, Rodrygo no finalizó con acierto una buena jugada individual y un chut de Kroos se perdió desviado.

El Granada nunca renunció al ataque y amenazó con varias llegadas claras con Luis Suárez como protagonistas.El colombiano dejó solo a Uzuni ante Courtois, pero el albanés no finalizó bien. Después, no pudo el delantero rematar en dos buenas jugadas nazaríes, los nervios –y los pitos– llegaron al Bernabéu.

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En el tramo final, de nuevo apretó el Madrid, pero los remates de Asensio e Isco se encontraron con un acertado Luís Maximiano.

Ancelotti movió el banquillo al descanso, dando entrada a Valverde, y la jugada no le pudo salir mejor. El Madrid arrinconó al Granada con una presión asfixiante y las llegadas comenzaron a caer una detrás de otra. Un centro de Marcelo, un disparo de Rodrygo y otro de Asensio se encontraron con el meta luso, al que se le acumulaba el trabajo.

El gol no llegaba y para ello salieron al campo Hazard y Jovic, que nada más entrar se combinaron en una gran jugada que el serbio remató algo desviado.

Pedía ya la hora el Granada, que no solo estaba sufriendo el acoso blanco, sino que además ya no enganchaba un solo contraataque. Y el asedio blanco encontró su premio gracias a la intensa presión local. Robó el Madrid al borde del área y Asensio sacó su maravilloso golpeo, ese que tanto se le reclama que use más, para sacarse un zapatazo que llevó el balón a la red ante la impotencia de Maximiano.

Quedaban algo más de diez minutos y casi amplió su renta el Real Madrid, de nuevo con Asensio como protagonista. No lo consiguió, pero tampoco fue necesario, el Granada no inquietó la meta rival y la victoria se quedó en el Bernabéu.