Tras dos años trabajando de sol a sol junto a Juan Carlos Ferrero en los “suburbios del tenis profesional”, Carlos Alcaraz, la gran perla del tenis español ha emergido entre los 100 primeros del ranking con actuaciones para la historia del tenis mundial en una temporada en la que sopló las velas de los 18 años, precisamente en la pista central del Mutua Madrid Open tras caer contra Rafa Nadal.
En este último año de progresión estelar, el joven pupilo del exnúmero uno del mundo ha ido dejando ríos de tinta a sus espaldas, ríos que en muchas ocasiones lo comparaban hasta la saciedad con el mejor tenista español de la historia. Ahora, una vez terminado su primera temporada en la élite - pues ya llevaba años dejando que hablar en categorías inferiores-, la comparación puede dejar el campo de la especulación para traducirse a datos concretos.
Solo dos tenistas, Djokovic y Federer, pueden comparar su carrera con la de Rafael Nadal, pues el balear acumula en sus vitrinas 21 Grand Salms, 88 torneos ATP, 5 Copas Davis y dos medallas de oro olímpicas. Sin embargo, ya hay un apartado en el que el rendimiento del balear y el del murciano pueden analizarse de tú a tú, su primer año completo en la élite.
El primer partido profesional
Ambos tenistas se presentaron al olimpo tenístico rompiendo récords de precocidad que asombraron al mundo, empezando por el debut en una cita profesional. Las primeras veces marcan las trayectorias de las carreras de éxito, y en ese sentido Nadal fue algo más precoz que Alcaraz, debutando en el circuito ATP a los 15 años y 330 días - siendo el número 762 del mundo- con victoria ante al paraguayo Ramón Delgado. El aprendiz de Ferrero lo hizo con los 16 años cumplidos, también con victoria, ante el español Albert Ramos Viñolas.
La primera lucha contra un Top 10
Otro hito que deja huella en la carrera de un tenista es el momento en el que te toca enfrentarte por primera vez a uno de sus ídolos, cuando los más grandes, los tenistas del top ten están a su mismo nivel de juego y solo una red les separa. En ese aspecto también se adelantó Nadal, que se midió -y venció a- a Albert Costa (Nº7 del mundo en el momento), mientras que Alcaraz lo hizo con 17 años en el partido en el que cayó ante Alexander Zverev (también Nº7 del mundo en el momento del partido).
Llegada a los 100 primeros y primer título ATP
Los hitos de precocidad se igualan cuando hablamos del ascenso en el ranking mundial, pues ambos llegaron al top 500 con 16 años, y grabaron su nombre en la lista de los más jóvenes en colarse entre los 100 primeros: eso sí, Nadal lo hizo con 16 años y 89 días, mientras que Alcaraz, el jugador más joven entre los 100 primeros actualmente, lo logró con 18 años y 7 días.
También igualan registro en la conquista del primer título ATP con 18 años, Nadal lo hizo en Sopot (Polonia) y Carlos en Umag (Croacia), aunque el balear se lo metió en el bolsillo siendo ocho días más joven que Alcaraz. No obstante, en este apartado hay un jugador que supera a ambos, el nipón Kei Nishikori.
Superando las expectativas marcadas
El primer año en la élite de un chico que trabaja desde los quince años con Juan Carlos Ferrero ha sido para enmarcar, pues ha terminado en el puesto 32 de la clasificación mundial en un curso en el que el objetivo marcado era la posición número 50. Además, lo ha hecho coronándose como el mejor sub-21 del año en las Next-Gen ATP Finals y batiendo una marca intacta 17 temporadas, el jugador más joven en alcanzar las 30 victorias en una misma temporada, logrado por Nadal en 2004.
Las grandes citas, los torneos Grand Slam, tampoco han amedrentado en sus inicios a dos jugadores que arrancaron a un ritmo descomunal en la élite. Nadal se convirtió con 17 años en el jugador más joven en alcanzar la tercera ronda de Wimbledon, desde que Boris Becker lo lograra con 16 en 1984. En este aspecto, la imagen del año la dejó Carlos Alcaraz, convirtiéndose en el jugador más joven de la Era Open -que se inauguró en 1968- en alcanzar cuartos de final del US Open.
La gran ausencia de la Copa Davis
A falta de horas para el comienzo de la Copa Davis, Carlos Alcaraz se convirtió - junto a Nadal- en la gran ausencia de La Armada en la edición de este año por su positivo en covid. Nadal también sostiene un récord de precocidad con la selección española, pues con tan solo 17 años, el que por entonces fuera pupilo de Toni Nadal, logró una victoria en el partido decisivo de las semifinales ante Radek Stepanek. En aquella ocasión España no contaba con sus dos cabezas de serie, el actual entrenador de Rafa, Carlos Moyá y el de Alcaraz, Juan Carlos Ferrero, pero el talento de Rafa cerró el pase a una final en la que España conquistó una ensaladera histórica.
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