La situación económica del Barça es de tal gravedad que la rebaja de sueldo de sus jugadores más importantes se ha convertido en la única manera de poder inscribir a sus últimos fichajes.

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Después de que Gerard Piqué fuese el primero en dar ejemplo, ahora han sido los otros dos capitanes quienes han bajado su sueldo para que, en la última jornada del mercado de fichajes, pudiera inscribirse a uno de los refuerzos más importantes que tienen previsto para esta temporada: el Kun Agüero.

Jordi Alba y Sergio Busquets han seguido el ejemplo del central y han decidido rebajarse un 25% su sueldo esta temporada, además de diferir un 60% en los próximos años. De esta manera, según ha confirmado el club, han permitido reducir la presión sobre el límite salarial y cumplir con el 'fair play'.

Gracias a esta decisión de sus capitanes, el Barcelona ha podido inscribir ya a todos sus nuevos fichajes. Eso no significa que no vayan a intentar rebajar aún más la masa salarial, ya que están intentando cerrar operaciones como la salida de Antoine Griezmann, además de la marcha de Ilaix Moriba al RB Leipzig que ya se cerró la jornada previa.

Rey Manaj, uno de los jugadores fichados este año, se irá a Italia, cedido al Spezia.