"Mi objetivo en esta vida era ser atleta olímpico. Ahora, lo que surja". Con esta filosofía se presenta Mohamed Katir en Tokio 2020, sus primeros Juegos Olímpicos. La nueva gran sensación del atletismo español, pese a su intención de disfrutar, es consciente de que tiene muy cerca hacer algo grande.

Así contamos en directo el 'Supermartes' de los Juegos Olímpicos de Tokio

A sus 23 años, es el poseedor del récord de España de 1.500m, 3.000m y 5.000m (distancia con la que debutará como olímpico, este martes a las 13:16 hora española), todos ellos batidos en apenas un mes, y apunta lejos en el año de su explosión como atleta de élite.

Nacido en Marruecos en 1998, Katir llegó a Mula, Murcia, donde reside, a los cinco años de edad y acompañado por su familia pocos años después de que padre cruzara el estrecho en patera en busca de una vida mejor. 

Desde entonces, y curtido a base de correr primero por descampados y después en carreras populares, el atleta que ha causado más sensación en los últimos años ha ido creciendo y rompiendo barreras deportivas y extradeportivas, como la que le tocó lidiar hace poco con Isaac Viciosa, tras romper el récord de los 3.000m que el palentino ostentaba desde el mismo año en que nació Katir.

"Me habría gustado que lo batiera alguien con apellidos castellanos", dijo Viciosa; unas declaraciones de tinte xenófobo a las que contestó el joven murciano: "Orgulloso de llevar los apellidos de mi abuelo".

Katir no sólo ha hecho ya historia en el atletismo español a base de zancada -su récord de 1.500 lo tenía hasta entonces nada más y nada menos que Fermín Cacho, desde 1997- sino que ha demostrado personalidad suficiente para destacar como estrella más allá del tartán.

En Tokio, sus primeros Juegos a los que llega con humildad pero sin miedo a las expectativas, puede producirse la gran confirmación de que España ha encontrado a otro gran diamante para engrandecer su historia.