Ricardo Costa se retiró del fútbol en activo la temporada pasada. El que fuera jugador del Boavista pasó a ser director deportivo del mismo club portugués, pero no ha durado demasiado en el cargo, pues ha dimitido del puesto tras un periodo de tensión absoluta entre la directiva y los aficionados del equipo.
Las amenazas sufridas por Costa desembocaron en una agresión física sufrida durante un entrenamiento del Boavista. Los malos resultados deportivos han llevado a una situación que se ha escapado de las manos y que ha terminado con el director deportivo tirando la toalla y dejando al equipo colocado en la última plaza de la clasificación.
“Hoy abandoné mis funciones en el Boavista FC después de sufrir una agresión por parte de la afición del club, durante el entrenamiento de ayer, y tras sucesivas amenazas. Ya no tengo las condiciones para seguir en el puesto. Deseo lo mejor para el equipo técnico, mis deportistas y el club, por el que siempre he tenido gran estima y respeto”, explicó en comunicado oficial Ricardo Costa, que habló sobre lo ocurrido como “un atentado a la integridad física”.
El club también se refirió a lo sucedido condenando la agresión sufrida por Costa. “Boavista FC anuncia que Ricardo Costa ha dejado de ser director deportivo del equipo, un cargo que lo ocupará Fary Faye. El Boavista agradece a Ricardo Costa su empeño, profesionalidad y dedicación por este escudo”, reza el comunicado. “Boavista condena y seguirá condenando todos y cada uno de los actos de violencia”.
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