Que el Dakar 2021 está siendo una pesadilla para todos los competidores y especialmente los copilotos ya lo habíamos visto en los primeros días, pero lo visto en esta caótica quinta jornada se resume en un vídeo, con el que la propia organización mostró las dificultades de Carlos Sainz para encontrar el camino.

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El matador necesitaba no perder más tiempo con los, hasta ahora, infalibles Nasser Al-Attiyah y sobre todo Stepháne Peterhansel: el primero porque lleva tres victorias en cuatro etapas y el segundo porque está mostrando una regularidad letal para mantener el liderato. El plan se le complicó nada más empezar porque perdió media hora antes del primer punto de control, algo que le pasó a otros pilotos también. 

Primero en el propio GPS con el que se puede seguir en directo la carrera y después en un vídeo que compartieron en las redes sociales de la organización se puede ver cómo Sainz da vueltas en círculo hasta que el sistema de su Mini validaba el punto de control.

La victoria fue para Giniel de Villiers, ganador del Dakar en 2009, y su copiloto, el español Álex Haro (que a punto estuvo de ser el navegante de Fernando Alonso en su aventura en el raid de 2020). El sudafricano fue uno de los pocos que no tuvo problemas de navegación, y siempre estuvo al frente, primero en su batalla en el crono con Erik Van Loon con el Toyota de Overdrive, y después contra Brian Baragwanath, que ya brilló en la etapa prólogo. 

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Tras el doblete sudafricano entró el que casi nunca falla, un Stepháne Peterhansel que sale fortalecido de esta dura jornada (sólo perdió dos minutos) con aún más ventaja sobre Al-Attiyah, que se dejó 4:38 en meta con su compañero del equipo oficial de Toyota.

Al final, Sainz salvó razonablemente los muebles. Llegó a estar a 30 minutos, de la cabeza de carrera, pero un arreón final en los últimos 100 kilómetros le permitió dejarse sólo 15 con el ganador y 13 con Peterhansel, con lo que ya son 48 los que pierde en la general con el galo. Justo delante del madrileño, Nani Roma acabó a 10 minutos y confirmó las buenas sensaciones del BRX de Prodrive.

Lorenzo Santolino pica alto

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En motos, Joan Barreda ya preveía en la meta de Riyadh que este jueves iba a sufrir mucho y así ha sido. Como ocurrió con los coches, para él y para los que salían por delante en motos fue un muy mal día, algo que fue aprovechado por el argentino Kevin Benavides. El de Salta parecía que iba a superar en una dura jornada al chileno José Ignacio Cornejo, que lideró hasta que llegó a la zona de dunas de los últimos kilómetros... pero tuvo un accidente que le mandó de bruces en el kilómetro 330. Más allá de las heridas en la cara, pudo continuar la carrera y acabó llevándose la jornada por sólo un minuto, pese a ir con la cara ensangrentada.

El mejor español de la jornada fue Lorenzo Santolino, que durante unos instantes parecía que iba a ser tercero hasta que llegó Toby Price. El piloto salmantino de Sherco cuajó su mejor etapa en este Dakar, después de brillar ya en 2019 y verse obligado a abandonar en 2020 por una dura caída que le dejó medio año lesionado. Por el camino, además, perdió a su madre por un cáncer en 2020 y en su honor luce el dorsal 15, que es el primero que ella le eligió cuando comenzaba sus andanzas en motocross.

Barreda perdió al final casi 20 minutos, 19:11, en un día en el que ya desde el principio del día se vio sin posibilidades. Se deja las opciones de hacerse con el liderato que rozó este miércoles y ahora tiene a 14:02 al nuevo líder, el vencedor del día Benavides.