Los problemas crecen para Zinedine Zidane: de nuevo, la defensa del Real Madrid se queda en cuadro tras las lesiones de Varane y Ramos con sus selecciones y la baja de Militao tras dar positivo en coronavirus.

Si hace unas semanas el técnico francés tuvo que hacer malabarismos y convertir a Lucas Vázquez en lateral para suplir las ausencias de Carvajal y Odriozola, ahora el reto está en configurar el próximo fin de semana una zaga competente en la visita del Villarreal a Valdebebas.

Sergio Ramos fue sustituido en el partido que enfrentó a España ante Alemania en la última jornada de la Nations League. El capitán madridista sufre molestias en el bíceps femoral derecho, aunque se desconoce por el momento el alcance de la lesión.

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Por su parte, Varane fue también cambiado en el choque de Francia contra Suecia por, según Deschamps, "un pequeño problema", aunque no ha trascendido por el momento la naturaleza del mismo.

Con los dos centrales titulares tocados y Militao aún pendiente de dar negativo en las próximas pruebas de Covid, Zidane tiene un problema para el compromiso inmediato ante el equipo de Emery.

Este martes, y dadas las ausencias por el parón de selecciones, el entrenador francés subió a varios jugadores del filial a entrenar con el primer equipo, por lo que quizá alguno de los canteranos acabe entrenando en la convocatoria. Sólo Nacho, si se confirma la baja de Varane, es central natural en la primera plantilla en ausencia del resto. 

El Real Madrid, cuarto a cuatro puntos del líder, la Real Sociedad, está arrojando serias dudas en el primer tramo de la temporada y los contratiempos en forma de lesiones o contagios no están echando una mano a un Zidane que deberá reinventar a su plantilla.