Antes del plato fuerte, la jornada 37 arrancó con un partido entre dos equipos que no se jugaban nada y que se resolvió por la vía rápida para los locales. El Eibar ganó 2-1 al Valladolid, en un partido en el que el Pucela jugó mucho mejor al final y pagó un serio despiste en la primera mitad.

Se adelantó el Eibar con un gol de cabeza de Pedro Bigas, según venía de la banda tras ser atendido por una falta. El tanto dejó noqueado al Valladolid, hasta el punto de que Inui aprovechó un resbalón (literal) de Caro, portero en este encuentro, cuando iba a recibir un pase de San Emeterio. El centrocampista japonés marcó cómodamente.

En la segunda mitad, Sergi Guardiola anotó el rechace de un penalti que Yoel había detenido en primera instancia para acercar a los de Sergio González, pero de nuevo desde los once metros, De Blasis anotó tras una falta en el área de Nacho a Charles y dejó rematado el encuentro.