Las grandes Ligas de deportes profesionales de Estados Unidos están planteando cuándo regresar a la competición, al igual que las del resto del mundo.
El mismo Donald Trump pidió en una reunión con la MLB (béisbol), NBA (baloncesto) y NFL (fútbol americano) que se planteara un escenario próximo para regresar cuanto antes y volver a una relativa normalidad tras el coronavirus.
Una de las principales dificultades es el desigual avance de la pandemia en los estados y cuidades. No están afectados igual en Nueva York que en Cincinatti, por ejemplo, o en Houston y Los Ángeles. El desplazamiento de personas, tanto público como los propios competidores, supone un quebradero de cabeza.
Así, desde la MLB, han planteado una solución que paliaría, al menos de momento, este problema y permitiría el regreso de su Liga: jugar a puerta cerrada (sin público) todas las mismas jornadas en la misma ciudad.
La propuesta en concreto es hacerlo en el área de Phoenix. en Arizona. La intención de la MLB es reanudar el campeonato en mayo, y dado que muchos equipos suelen hacer sus pretemporadas en esa zona, conocen a la perfección los servicios que tiene. El Chase Field, campo de los Arizona Diamondbacks, sería el estadio común para todos.
Los jugadores, cuerpo técnico y demás personal de cada uno de los 30 equipos se alojarían en los diferentes hoteles de la ciudad, donde vivirían un relativo confinamiento. Fuentes de la MLB han asegurado a ESPN que esta propuesta tiene el OK inicial del Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), así como los Institutos Nacionales de Salud, a falta de concretar las medidas de aislamiento.
Los desplazamientos, la gran dificultad del deporte con el coronavirus
Si la idea de la MLB cuaja, acabarían con uno de los grandes problemas que se ha encontrado el deporte mundial con la progresiva suspensión de competiciones.
Los Mundiales de Fórmula 1 y MotoGP, por ejemplo, son dos casos prototípicos. Ambos resplazan un enorme contingente de personas de muchas nacionalidades. Las restricciones de acceso a los países de viajeros de países donde la pandemia golpeó de manera muy fuerte, caso de China al principio y de España e Italia después, propició que se cancelasen las primeras carreras de ambas competiciones, aunque después la globalización de la epidemia ha hecho que esas prohibicionesse generalicen.
Para las competiciones futbolísticas sería una solución también a estudiar. La Champions League y la Europa League son, de hecho, las dos principales que se han tenido que parar, tienen como principal problema, precisamente, el desplazamiento de los equipos. Los partidos entre Atalanta y Valencia o entre Atlético y Liverpool fueron muy criticados porque las restricciones se consideraron escasas.
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