Ser árbitro en un arte marcial implica muchas más cosas que en cualquier otro deporte. Además de velar por el cumplimiento de la normativa en el evento en cuestión, un juez, en este caso de muay thai, tiene que tener un sexto sentido para saber el estado de los deportistas después de recibir un golpe, las consecuencias que este puede traer, y cómo reaccionar en el caso de una desgracia. 

Precisamente eso es lo que demostró Sittachi Ineiad en el combate que regía entre Neymar Paeminburee y So Sovanrathana, salvando al tocayo del futbolista del PSG del que podría haber sido un fatídico final.

En un enganchón entre los dos luchadores, Sovanrathana le propina un fuerte codazo a un Neymar ya grogui, que pierde el conocimiento y cae inconsciente a la lona. Al caer erguido, era muy probable que el mayor daño de la caída se lo llevase la cabeza, pero ahí estuvo el héroe de la noche para evitarlo.

Al ver cómo estaba cayendo el luchador, Ineiad se tiró sujetando la cabeza de Paeminburee y evitando de esa manera que el choque contra el suelo tuviese consecuencias mucho más graves para la víctima. Una acción que se ha vuelto viral en el mundo de la lucha y que ensalza la importante de los árbitros en deportes tan arriesgados como este.