El 23 de enero de 2015 es una fecha marcada en los libros de historia de la NBA. gracias a Klay Thompson. En el partido que enfrentaba a los Sacramento Kings contra los Golden State Warriors en el duelo californiano, el escolta de los de azul y dorado firmó el cuarto más anotador de la historia de la liga.

Con un par de minutos del tercer cuarto ya cumplidos, comenzaba el festival anotador de Thompson con el partido igualado a 58 puntos. El '11' firmaba unos escandalosos 37 puntos, con 9/9 en triples, sin ningún tiro fallado (13/13) y con tan solo dos tiros libres. De hecho, él solo superaba en 15 puntos a todo el equipo de Sacramento juntos.

Además, no fue solo una anotación estratosférica, sino que consiguió que su equipo terminase el cuarto con 24 puntos de ventaja sobre los Kings. El partido terminó el encuentro con 52 puntos y 5 asistencias, y Golden State imponiendose a Sacramento por 126 a 101. 

Thompson fue junto con Curry el jugador más determinante de esos Warriors que a la postre terminarían ganando el anillo de campeones de la NBA esa temporada. De hecho, el camino al campeonato no fue excesivamente complicado para los de Steve Kerr que solo perdieron cinco de los veintiún partidos de playoff que disputaron, enfrentándose a equipos como los Rockets o los Cavaliers de LeBron. Además, todas las eliminatorias las ganaron por dos o más encuentros en el cómputo global.