Jose María Gimenez dejó una de las imágenes de la final de la Supercopa de España entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid. El defensa uruguayo estaba cuajando un buen partido, de hecho, fue una de las apuestas de Simeone, ya que venía de una lesión.

Con el tiempo extra ya comenzado, concretamente, en el minuto 98, el Cholo decidió dar entrada al campo a Savic, que entró sustituyendo a Giménez. El cambio no fue bien recibido por el central, que se marchaba cabreado. 

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Una vez llegado al banquillo, el defensor realizó ostensinbles gestos de enfado, llegando a lanzar contra el suelo sus propias espinilleras y unas botellas de agua que se encontraban a su alrededor. Todo ello acompañado de lamentaciones por su marcha del terreno de juego, unos gestos que dejaron atónitos a sus compañeros.