La liga inglesa estrenó este año el VAR en sus partidos, una temporada más tarde de lo que lo hicieron la mayoría de grandes ligas y competiciones, a la espera de mejoras para tener una implantación adecuada. Sin embargo, las últimas críticas que llegan desde Premier apuntan hacia la exactitud de la herramienta.

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Así es, varios equipos de la liga se han quejado de lo milimétrico que es el VAR, después de varias decisiones en las que apenas un píxel validaba o invalidaba una acción, que en algunos casos había terminado en gol. El uso matemático del videorbitraje ha provocado que tanto algunos periodistas como hinchas de los equipos perjudicados salgan a criticar el VAR por no ser nada permisivo con ciertas acciones. 

En una misma jornada, hasta en cuatro encuentros se ha visto cómo el VAR anulaba o concedía un gol por una jugada de fuera de juego que se decidió por milímetros. En el primer caso, el Liverpool fue el beneficiado de la exactitud del videoarbitraje cuando anulaba un gol del Wolverhampton que empataría el partido justo antes del descanso. Pese a que el árbitro lo concedió en primera instancia, el VAR le llamaría para corregir la decisión, que a la postre sería determinante en la victoria de los reds por 1-0.

También el Manchester City fue otro de los beneficiados por los servicios de arbitraje. En el partido que le medía al equipo revelación de la Premier League, el Sheffield, los de Guardiola encajaban el primer tanto del partido rondando el munto 30 de la primera parte con un gol de Mousset. Sin embargo, el juego no se reanudaría hasta que el VAR le comunicase al árbitro del encuentro que el futbolista del Sheffield se encontraba en posición antirreglamentaria, por lo que se anuló el tanto. Dicha corrección también terminaría siendo decisiva para el devenir del partido, ya que el City se terminó imponiendo por 2-0.

También en los partidos del Southampton contra el Crystal Palace y el del Brighton contra el Bournemouth hubo dos goles que fueron anulados por a penas unos milímetros, a Zaha (Crystal Palace) y Burns (Brighton).