La acción más polémica del Real Madrid - PSG llegó al borde del descanso. Mauro Icardi fue derribado por Thibaut Courtois en uno de los pocos ataques, pero uno de los más peligrosos, del conjunto galo. El argentino había ganado la espalda a los defensores blancos y el portero belga se tiró con todo para frenarle.

Icardi cayó al suelo e inmediatamente el árbitro, el portugués Artur Dias, no lo dudó: tarjeta roja a Courtois y falta. Las dudas sobre la acción fueron las suficientes para que el VAR entrara en juego, en principio para cambiar la decisión del colegiado: tarjeta amarilla y penalti, dado que el derribo fue dentro del área. 

Era lo que esperaban todos, incluso un Courtois que se veía ya de camino al vestuario, pero lo que revisó el VAR fue un empujón de Gueye a Marcelo en el centro del área. La normativa es clara: dado que esta falta, que lo era, fue previa a la acción de Courtois e Icardi, esta quedó eliminada de la ecuación.