Unos "plazos mínimos" que han criticado hoy en rueda de prensa los secretarios generales de UGT de Cantabria, Mariano Carmona, y CCOO, Carlos Sánchez, quienes han censurado una "falta de respeto al diálogo social", sobre todo cuando, en su opinión, el Gobierno de Cantabria "ha tenido tiempo" para elaborar el presupuesto y no lo ha hecho aduciendo una "excusa" como el techo de gasto, que tampoco ahora conoce.

Los sindicalistas han explicado que no han recibido el documento -que el Ejecutivo les ha dicho que les hará llegar hoy en un "pen drive"- aunque el Gobierno ha entregado en mesas sectoriales las cuentas respectivas.

En este contexto, Carmona y Sánchez no quieren valorar "individualmente" las partidas sino todo el conjunto presupuestario, que aún desconocen. "No opinamos de una parte si no conocemos el todo", han coincidido. "Con nosotros que no cuenten para iniciar un viaje sin saber a dónde", han apostillado.

Sí han adelantado que el presupuesto del Servicio Cántabro de Empleo para 2017 es "igual" que el de este año, algo que "chirría".

Al hilo, han dicho que se sienten "un poco perdidos" y no saben, por ejemplo, qué cantidad será necesaria para financiar los 80 millones de incremento presupuestario anunciados.

Carmona ha dicho que los sindicatos seguirán en la mesa del diálogo social pero "no para llevar el botijo", opinión que ha compartido Sánchez, quien ha recordado que ésta se constituyó hace un año con la reivindicación de que sindicatos y patronal pudieran discutir y negociar el presupuesto, lo que no se pudo materializar en 2016. Su presidente, el jefe del Ejecutivo, Miguel Ángel Revilla, afirmó entonces que aquello no volvería a ocurrir y "ha vuelto a ocurrir", ha denunciado.

"No es que lo tengamos que negociar, es que tenemos que conocerlo", ha subrayado el líder de CCOO, que ha reconocido que su sindicato ha "confiado" en este Gobierno, que les ha llamado algunas veces pero ahora "ha sido muy torpe" y ha cometido una "falta de respeto al diálogo social". Porque, a su juicio, la negociación presupuestaria de PSOE y PRC tenía que comenzado en verano.

Sánchez ha opinado que el Gobierno "tenía que ser valiente" y haber presentado el presupuesto sin esperar a conocer el techo de gasto ni el objetivo de déficit, "que tampoco saben ahora", como han hecho otras comunidades autónomas.

Algo que para el sindicalista revela "asincronía" y "chirridos" en el Gobierno, en el que las consejerías del PSOE "nos han llamado" y las del PRC "no".

En el mismo sentido, Carmona ha manifestado que "hay una parte del Gobierno que no cree en esto" (el diálogo social) y ha insistido en que UGT no está "para llevar el botijo a nadie". "Si quieren aprobar el presupuesto, que lo hagan", teniendo en cuenta las consecuencias de no contar con los sindicatos.

Ahondando en este aspecto, Sánchez ha dicho que sería "una puñalada al diálogo social" que, para sacar adelante el presupuesto en "plazos mínimos", los agentes sociales tuvieran que dirigirse a los grupos parlamentarios para plantear sus enmiendas.

Unos plazos mínimos que CCOO atribuye, entre otras causas, a la necesidad fiscal de que el presupuesto esté en vigor el 1 de enero.

PETICIONES PRESUPUESTARIAS

Respecto a las prioridades que debería tener el PGC, Carmona ha instado a que se atiendan las necesidades sociales de los 30.000 cántabros que no perciben subsidio o ganan menos de 400 euros al mes "y después al resto", y ha instado a reflexionar sobre si se quieren llevar a cabo proyectos "cortoplacistas" o a medio plazo.

Una reivindicación de "frenar la pobreza" que Sánchez ha compartido, además de pedir que todas las ayudas o subvenciones a empresas sean "exclusivamente" para las que se comprometan a un empleo "estable" y con salario "decente", y no se dé "ni un euro" a empresas para la creación de trabajo precario.

Igualmente ha sostenido que los presupuestos "deberían ir en la dirección" de "ni una sola congelación salarial más en ningún sitio", dada la recuperación económica.