'Juego de tronos': ¿Qué pasó con el gato de Tommen?

Con lo aficionados que son los responsables de Juego de tronos a mostrar decapitaciones, degollaciones, descuartizamientos y demás truculencias, resulta que ha habido una muerte que no se han atrevido a poner en escena. Y la muerte de un personaje muy querido, además. Hablamos de Ser Garras, el gato del malogrado Tommen Baratheon (Dean-Charles Chapman), cuyo fallecimiento ha sido anunciado por el showrunner David Benioff en Entertainment Weekly (vía io9).

Aunque solo apareció en una escena de la cuarta temporada, cortándole el rollo a Tommen y Margaery (Natalie Dormer), Ser Garras tenía el suficiente carisma gatuno como para que los espectadores se preguntasen qué fue de él. Ahora, Benioff ha desvelado el misterio. Y, en la mejor tradición tronista, la resolución del mismo ha sido sangrienta. "Cersei odiaba tanto el nombre 'Ser Garras' que no podía dejarle vivir. Así que inventó su ejecución más diabólica", explica el showrunner. Y, para colmo, se regodea, porque según explica la muerte del micho habría sido "tan horrible que no pudimos emitirla". Según apunta Benioff, el escalofriante suceso tuvo lugar tras el suicidio de Tommen al final de la sexta temporada.

La explicación de por qué Ser Garras abandonó los Siete Reinos de Poniente es, en realidad, bastante más prosaica. Porque, según explica David Benioff, el peludo actor que daba vida a la mascota de Tommen era tirando a insoportable. "Trabajar con el gato no era nada divertido: la frase 'como pastorear gatos' ['like herding cats', expresión anglosajona para describir una tarea desesperante] existe por una razón".