'Juego de tronos': George R.R. Martin confiesa que la serie "no fue muy buena para él"

El autor de la saga en que se basa la ficción de HBO no ha podido evitar que le afecte la polémica acogida por su desenlace.
'Juego de tronos': George R.R. Martin confiesa que la serie "no fue muy buena para él"
'Juego de tronos': George R.R. Martin confiesa que la serie "no fue muy buena para él"
'Juego de tronos': George R.R. Martin confiesa que la serie "no fue muy buena para él"

Hace ya un tiempo que Juego de tronos llegó a su fin, pero eso no significa que vayan a dejar de aparecer reacciones a su final, además de testimonios de cómo se vivió. Sobre todo, porque la serie desarrollada por David Benioff y D.B. Weiss no se marchó precisamente de forma calmada, sino que a medida que se acercaba su final iba afianzándose un descontento que se materializó en unas notas pésimas e incluso una recogida de firmas para que rehicieran la octava temporada. Y los actores tampoco se quedaron callados.

En medio de todo esto se encuentra George R.R. Martin, autor de la saga literaria en la que se basa la serie, y que fue superada por los capítulos llevándole a una coyuntura de lo más delicada que, no obstante, parecía llevar con entereza. "No puedes contentar a todo el mundo, así que tienes que contentarte a ti mismo", dijo en una ocasión, antes de achacar todo el caos generado a la toxicidad de Internet. No obstante, durante una entrevista con The Guardian ha descrito cómo ha llevado el fenómeno, y la respuesta corta es que no muy bien.

De hecho, Martin añora esos días en los que era un escritor anónimo. "Ya no puedo ir a tiendas de libros, que era lo que más me gustaba hacer del mundo. Deambular de montón en montón, coger algunos libros, leerlos por encima, irme con un montón de libros de los que no había oído hablar antes de entrar", rememora. "Ahora, cuando entro en una tienda de libros, me reconocen en menos de 10 minutos y se forma una muchedumbre a mi alrededor. He ganado cosas, pero también he perdido otras muchas".

Hasta el punto de que no duda en calificar el final de la serie como liberador, aunque eso no vaya a contribuir a librarle de esa fama de la que reniega. "No quiero ir a una fiesta donde una sucesión interminable de personas quiera echarse unas selfies conmigo. No es tan divertido como lo era en el pasado. Ahora es trabajo", dice con amargura, para al final decir abiertamente que "no creo que la serie fuera muy buena para mi vida".

Y es que Martin tiene pendiente finalizar Canción de hielo y fuego, para la que aún le queda por publicar Vientos de invierno y Sueño de primavera. Dado que su último libro hasta la fecha, Danza de dragones, fue publicado en 2011, se ha convertido en un lugar común de la cultura pop definir a Martin como un escritor lento, algo que parece que ha acabado afectándole.

"Lo que debería acelerarme al final que hace lento", admite. "Todos los días me siento a escribir e incluso si tengo un buen día... probablemente me acabe sintiendo fatal porque estaré pensando 'oh dios, tengo que acabar este libro. Sólo he escrito cuatro páginas y debería haber escrito cuarenta".

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