¿Influyente? Pues sí: no exageramos al decir que Mad Men hizo historia con su visión desencantada del pasado de EE UU. ¿Problemática? Pues también, en especial debido a los fans y periodistas que entendían al revés tanto sus guiones como el personaje de Don Draper. Christina Hendricks, que conoció eso de primera mano, recuerda hoy el sexismo sufrido por las actrices de la serie.
En una entrevista con The Guardian (vía IndieWire), la intérprete de Joan Holloway señala lo mucho que tardó la prensa en enterarse de que el show también incluía personajes femeninos. "Pasaron tres o cuatro temporadas y de golpe la gente nos quería a nosotras en las revistas. Nos quedamos en plan: 'Esto es muy raro... llevamos ya un tiempo haciendo esto", bromea.
"Está claro que hubo una época en la que nos llevamos los aplausos de la crítica y conseguimos mucha atención por nuestro buen trabajo y nuestro trabajo duro", señala Hendricks. Pasada esa luna de miel, tanto ella como January Jones y Elisabeth Moss se enfrentaron al hecho de que la prensa solo las quería por lo de siempre.
"Lo único que me preguntaba la gente era por mi sujetador", recuerda Christina Hendricks. "Y solo hay dos frases que puedas decir acerca de un sujetador".
Las palabras de la actriz dan aún más rabia si, como señala ella misma, recordamos lo mucho que Mad Men contribuyó a poner de moda el estilo (y las actitudes) retro entre el público masculino. "Los hombres empezaron a vestirse como Don Draper y Roger Sterling: volvieron los trajes y las corbatas finas", comenta.
Por desgracia, según sus palabras, se ve que algunos también decidieron copiar la actitud de dichos personajes hacia las mujeres. ¿Qué decíamos de entender las cosas al revés?
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