12 cosas que queremos ver en la serie de 'The Legend of Zelda'

Una lista de elementos que nunca faltan en las aventuras de Link, y de los que Netflix nunca debería olvidarse para su programa.
12 cosas que queremos ver en la serie de 'The Legend of Zelda'
12 cosas que queremos ver en la serie de 'The Legend of Zelda'
12 cosas que queremos ver en la serie de 'The Legend of Zelda'

Todavía cuesta creérselo, ¿verdad? Tras muchos años de vacilaciones, y de echar por tierra algún fan film que otro, los mandamases de Nintendo han dado luz verde para adaptar una de sus sagas más emblemáticas: The Legend of Zelda. Por primera vez desde que Shigeru Miyamoto (también creador de Mario, y Premio Príncipe de Asturias de las Artes) se los sacó de la manga en 1986, el héroe Link, el villano Ganondorf y la princesa que da título a la franquicia lucharán en el país de Hyrule, sin necesidad de que tú aprietes el botón de start ni te dejes los dedos en los mandos del controlador. Para colmo, dicho conflicto tendrá lugar en una serie producida por Netflix, cada vez más en la cresta de la ola tras su alianza con Marvel (Daredevil) y los éxitos de Orange is the New Black House of Cards. 

Ahora bien: en sus casi tres décadas de historia, The Legend of Zelda ha pasado por mutaciones mil, desde los píxeles como puños de la Nintendo Entertainment System (la consola en la que debutaron hasta visiones más oscuras (Majora's Mask, Twilight Princess) o más disneyanas (The Minish Cap, The Wind Waker): 17 entregas oficiales, sin contar los spin offs y demás, dan para muchísimo. Como el show será de imagen real, y como ya hay quienes lo describen como "un Juego de tronos para toda la familia", suponemos que no se tratará de un acaramelado festival del buen rollo, pero poco más. Aunque eso no es del todo cierto: también sabemos que en él no pueden faltar 12 elementos que, o bien han sido cruciales en la saga desde su comienzo, o se han vuelto imprescindibles con los años. ¿Estáis dispuestos a recordarlos con nosotros?

El arco de las hadas

2292173-ZeldaMovie_60310_screen

Desde 1986, cuando Link vistió por primera vez su gorro verde, las aventuras del héroe han seguido un esquema casi invariable: explorar, encontrar objetos y usar esos objetos para abrir el camino hacia el siguiente nivel. Y, para progresar en esta estructura, hay que hacerse con un arsenal de armas que no sólo servirán para apiolar enemigos, sino también para resolver puzzles y despejar senderos. El arco es todo un clásico de dicha lista (no digamos si, además, lo usas para disparar flechas de luz), pero en ella también entran el bumerán, las bombas, el garfio, el martillo, el escudo espejo y muchos, muchísimos otros elementos que han ido incorporándose a la saga durante sus casi 30 años de historia. El Link de los videojuegos nunca ha tenido problemas para guardar tanta quincallería, pero ¿cómo se las apañará el de la serie para transportarla?

Las rupias

rupees_wallpaper_by_water16dragon-d4vufmo

Estos cristalitos parecen poca cosa al principio. Pero su importancia es mayúscula, puesto que sirven como monedas en el país de Hyrule y aledaños: los zeldamaníacos aprenden rápido a identificarlos según su color (los verdes son los menos valiosos, mientras que los azules, naranjas, púrpuras... van incrementando su poder adquisitivo) y a conseguirlos mediante múltiples estratagemas, como matar mónstruos al por mayor, aceptar encargos o, sobre todo, romper jarrones para así hacerse con su contenido. ¿Servirá el vandalismo para conseguir rupias en la serie, o nuestro héroe tendrá que trabajar por cuenta ajena entre aventura y aventura?

Las piezas de corazón

Fishing_HeartPiece_Large

En los juegos de The Legend of Zelda, la resistencia de Link aparece representada por una fila de corazoncitos: cuando el último de éstos se vacía, el héroe desfallece y hay que volver a la última partida guardada. Generalmente, tras haber despachado a un villano importante, el jugador obtiene un contenedor de corazón, que le permite incrementa su vitalidad. Pero esto siempre acaba sabiendo a poco, con lo cual uno debe ponerse a la búsqueda de esas piezas de corazón ocultas en los lugares más inverosímiles. Seguramente, la serie de Netflix le ahorrará esta tarea al protagonista, pero no descartemos que en ella haya algún talismán de aspecto cardíaco y gran importancia en la trama. Y, de haberlo, podemos estar seguros de que encontrarlo será un suplicio.

Epona

epona

Apareció por primera vez en The Legend of Zelda: Ocarina of Time (1998), y los fans le cogieron cariño desde el minuto uno por su buen carácter y su velocidad: Epona, la yegua de Link se ha dejado ver desde entonces en casi todos los juegos de la saga, siempre fiel al campeón de Hyrule. Y, como la cosa ecuestre va muy bien para la épica, nosotros estamos seguros de que tiene asegurado un lugar en el show de Netflix. Esperemos que Link cuente con un buen suministro de zanahorias para mantenerla contenta...

Los Goron

large

En el primer The Legend of Zelda, el reparto de secundarios no era para tirar cohetes: aquel viejecillo que te daba tu primera espada ("Salir solo es peligroso: toma esto"), alguna bruja que otra, y para de contar. Pero, con el tiempo y los títulos, el censo de Hyrule ha ido incrementándose con multitud de razas de lo más diverso. A los Hylianos, humanoides de orejas puntiagudas como el protagonista, hay que sumar los acuáticos Zora, los Gerudo del desierto, los Twili de la Dimensión Crepúsculo, los Kokiri del bosque y muchas otras especies más, entre las que figuran estos seres de aspecto rocoso, barriga prominente y tendencia a la pachorra. ¿Cuántas razas tendrán su lugar en la serie? ¿Las veremos a la greña, como en Hyrule Warriors, o se llevarán bien entre ellas?

Los Moblin

Wind-Waker-Moblin

A estas criaturas de porcino rostro les sobra el músculo, pero de cerebro (y de higiene corporal) andan algo escasos. Será por esa cortedad de luces, pero el caso es que Ganondorf nunca ha tenido problemas para hacerles formar parte de su ejército. Desde 1986, los Moblin forman parte de una inacabable nómina de enemigos contra los que Link ha debido batirse el cobre, tanto en mazmorras como en campo abierto: si nunca has sentido rabia cuando un Keese te ha tirado de una plataforma, un Lyke-Lyke se ha comido tu escudo o un Stalfos ha recompuesto su cuerpo esquelético tras caer ante tus espadazos, entonces dudamos de que hayas jugado jamás a un Zelda. Por no hablar de lo 'agradable' que resulta oír el grito paralizante de un ReMuerto...

Los templos

Skyview-Temple-Screenshot

Hyrule es un lugar peligroso, en general, pero en él hay lugares donde incluso el héroe más bregado debe sudar tinta para sobrevivir: los templos dedicados a los poderes elementales (el Templo del Agua es siempre el más puñetero) o a fuerzas del espíritu (el Templo de la Sombra, que suele estar repleto de sustos). En estos lugares aguardan criaturas de pesadilla, como Gohma, Molgera y el Rey Dodongo, trampas a granel, pruebas de ingenio que han hecho llorar de impotencia a más de un jugón veterano... y también la mayoría de los objetos necesarios para terminar el juego. Fiaos de nosotros: en sus aventuras para Netflix, Link deberá visitarlos más de una vez, y pasarlas canutas en el proceso.

La Espada Maestra

Master_Sword_in_the_Lost_Woods

El sendero de Link nunca es fácil, pero, como hemos visto, el héroe de Hyrule lo recorre bien armado. Y la joya de su arsenal es esta espada, forjada por la diosa Hylia y a la que no se resiste ningún espíritu maligno. Hacerse con la Espada Maestra suele ser difícil, pero la satisfacción que sentimos cuando el héroe consigue empuñarla no nos la quita nadie. Según nos enseñó The Legend of Zelda: Skyward Sword (2011) en su interior vive Fi, una entidad cibernética con un sentido del humor algo puñetero.

La música

Link_and_Sheik

Desde la flauta del primer juego hasta el arpa de Skyward Sword, pasando por la batuta de The Legend of Zelda: Wind Waker (2002) y la inevitable ocarina, Link ha usado muchos instrumentos musicales durante sus viajes. Algo que debería aparecer reflejado en la serie y que nos recuerda que la saga Zelda es una de las más melodiosas de la historia de los videojuegos. Es más: el repertorio de temas compuestos por Koji Kondo (entre otros) para ambientar las historias del héroe, su princesa y su archienemigo es enciclopédico, y pondrá en apuros a los encargados de una selección para la BSO de la serie. ¿Habrá un momento épico al son de Ballad of the Godess¿Volverá la melodía de Song of Storms a dar vueltas en nuestra cabeza? Se admiten apuestas, pero lo que sea, sonará...

Las Trifuerzas

my_custom_triforce_background_by_supervampirates-d58ita8

Los macguffin por excelencia de la saga de Link y Zelda son estos tres objetos triangulares, cada uno de los cuales está asociado con una de las diosas de Hyrule: la Trifuerza de Din, deidad del poder, está en manos de Ganondorf (así de difícil es quitarle de enmedio), la de Naryu se asocia con la sabiduría y le corresponde a la princesa Zelda... Y luego está la de Farore, que representa el valor y cuyos fragmentos hemos reunido a lo largo de muchas, muchas horas de juego (¿recuerdas esas travesías en Wind Waker para sacarlas del fondo del mar?). Dado su valor como icono de la franquicia, está clarísimo que las Trifuerzas se dejarán ver en la serie. Sólo queda saber cómo, y en cuantas piezas se habrá roto esta vez.

Malon

Malon_by_marvinmarvin

Vale: sabemos que esta joven tan simpática sólo ha aparecido en tres juegos (Ocarina of Time, Oracle of Seasons, Four Swords Adventures y The Minish Cap), pero nos cae muy bien y además nos sirve para recordar que la princesa Zelda no es la única chica en la vida de Link. No nos malinterpretéis, porque no hablamos de romance, sino de personajes secundarios tan enigmáticos como Midna, tan aguerridos como Impa Nabooru o tan adorables como Saria Abril. Y, ya que estamos con la paridad de género, recordemos que la propia princesa es una fiera con el arco, y a veces también con la espada. Esperemos que la serie no la reduzca al rol de damisela en apuros... 

 ...Y una historia completamente diferente

the-legend-of-zelda-aniversary-hd

Por mucho que los señores de Nintendo quieran proporcionarle ahora una cronología a la saga The Legend of Zelda, los jugadores con solera saben que ésto no es necesario: uno de los puntos fuertes de cada entrega es su capacidad para hallar variaciones sobre un tema único. Link, la princesa Zelda y Ganondorf siempre estarán ahí, así como los elementos que hemos enumerado en este reportaje, pero todos ellos se encontrarán en situaciones inesperadas y, sobre todo, originales. Y eso es lo que le pedimos a Netflix: que sepa conjugar todo lo que ya hemos visto en nuestras videoconsolas, para hacerlo brillar de nuevo.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento