Todos los guiños, referencias y easter eggs de Guardianes de la Galaxia Vol. 2

¿Por qué nos gustan tanto las películas de superhéroes? Nos gustan por la acción, por los diálogos llenos de chispa, por la épica, por el trauma que acompaña a cada personaje… Y por supuesto nos encanta perseguir cada referencia o guiño al universo Marvel. Pero es que además Guardianes de la Galaxia es, en ese sentido, la saga más especial de la Casa de las Ideas ya que a parte de una galaxia entera para descubrir cientos de referencias que harán las delicias de los más estudiosos del cómic, su protagonista, Star Lord, se ha criado en la Tierra y por lo tanto las referencias pop y ochenteras sobrevuelan durante toda la aventura espacial. Nostalgia y acción superheróica… NO SE PUEDE PEDIR MAS.

Aquí vamos con el informe de guiños de Guardianes de la Galaxia Vol. 2. Que por cierto van bien servidos de SPOILERS… Así que, tú veras.

Lo bueno de tener un universo entero para contar una historia es que puedes meter todo tipo de guiños intergalácticos sin forzar demasiado. Por ejemplo, en la primera parte Quill tenía un lío, del que ni siquiera se acordaba al día siguiente, con una jovencita de piel rosa oscuro, era un Krylorian llamada Bereet, una especie que aparece en la saga de Hulk con bastante frecuencia. En el Vol. 2 James Gunn les da una representación entre las filas de Yondu. También tenemos aquí a un Aakon, un pueblo bélico que viene de los cómic de de Nova o Capitán Marvel.

Y si nos fijamos bien en todos los planetas y especies que salen cuando Ego comienza su expansión por el universo veremos Xandarians y Kree en sus respectivos mundos.

Los cameos de Stan Lee son marca de la casa, incluso en títulos como Guardianes de la Galaxia cuyos cómics no tienen mucho que ver con Lee. Sin embargo, eso da igual, queremos ver al padre de Marvel dando la nota con su gag de turno. Solo que esta vez James Gunn ha rizado el rizo.

Cuando Rocket y Yondu hacen sus repetidos (y peligrosos) saltos por el hiperespacio pasan de refilón por un planeta donde Stan Lee está comentando a los omnipresentes Vigilantes lo bien que se lo ha pasado de mirón en el resto de películas de Marvel. ¿Eso significa que él es un Vigilante de incógnito?… Es decir, ¿es el mismo personaje en todas las películas?

Siguiendo con el cameo de Lee, la cámara hace un primer plano a uno de los Vigilantes. Y ya que estamos elucubrando teorías podríamos pensar que ese no sería otro que Uatu, un Vigilante destacado entre los demás que se enamora tanto de la tierra que desobedece su código (ellos pueden mirar pero no interferir) para salvar a la humanidad un par de veces.

Cuando se supo que Sylvester Stallone iba a estar en esta película, Internet se llenó de diferentes teorías al respecto. ¿A quién demonios interpretaría el hombre que hizo de Rocky Balboa? Se dijo que a un anciano del universo, pero finalmente ha sido mucho mejor. Stallone es Stakar un antihéroe que es parte de los Guardianes de la Galaxia en un futuro alternativo del s.XXXI. A parte de él también aparecen Charile-27, Aleta, Mainframe (que tiene la voz de Miley Cyrus en la película original), Krugar y Martinex…

No sabemos qué importancia tendrá su personaje en la tercera película… Pero desde luego su cameo no se va a quedar aquí.

Ego en los cómics es un planeta viviente. Un planeta con cara de tío barbudo, literalmente. Esto es tan loco que James Gunn decidió darle un alter “ego” humano que es Kurt Russell, sin embargo no se pudo contener para darle a Ego, el planeta creado por Ego, una disimulada expresión humana que podemos ver cuando Rocket y Yundu llegan para unirse al rock an roll.

Los fans criticaron mucho la forma humana del personaje, lo que nos lleva al siguiente punto…

En los cómics Ego crea un avatar para interactuar con los seres más pequeños. Hay una versión que se parece muchísimo A Russell. Un científico llamado Tana Nile recoge una muestra del planeta y se la lleva para formar otro planeta al que bautiza como Blackworld. Ego-Prime, que es esta versión humanoide de Egole sigue acaba en una pelea épica.

Ego no sólo es un planeta, sino que es un celestial. Si hacemos un poco de memoria El coleccionista interpretado por Benicio del Toro en la primera película hablaba sobre uno de ellos, uno en concreto que tenía una Piedra del Infinito en  su arma y que iba por ahí destrozando planetas. Y es que estos seres celestes tienen un poder descomunal superior a cualquier superhéroe de pacotilla. Por eso funcionan como jueces, jurados y ejecutores del Universo. Pero claro, como en todos los lados, al final la ambición lo envenena todo.

James Gunn es un enamorado de Howard el pato. Le sacó en la sala del Coleccionista en la primera película y ha vuelto a repetir en esta. Es su Stan Lee particular. Esta vez le ha colocado en un tugurio del planeta Contraxia, donde los saqueadores se están tomando un descansito. Ahí vemos a nuestro querido Howard dando la chapa a un interlocutor mientras saborea un rico cóctel.

Y de nuevo, James Gunn repite otro cameo aunque esta vez a través de una foto y durante los créditos.  Este perro fue lanzado al espacio como un cosmonauta más y allí desarrolló poderes telepáticos. En la primera película es parte de las posesiones de El Coleccionista (dio para mucho aquella trama).

Uno de los guiños más maravillosos de la saga, y me atrevería a decir que de todo Marvel es el de colocar los sonidos de los juegos arcade en las modernas consolas con las que los Sovereign controlan sus naves de guerra. O sea, una civilización tan desarrollada que se puede permitir diseñar cada miembro de su especie para alcanzar la perfección y que dominan la tecnología hasta tal punto que pueden mandar ejércitos de naves controladas a través de modernos ordenadores en su hogar, dulce hogar y que ponen el sonido de las máquinas recreativas para darle vidilla a la guerra. NO SE PUEDE MOLAR MÁS.

Un momentazo de los créditos. Grandmaster, interpretado por Jeff Goldblum será uno de los villanos en Thor: Ragnarok. Y en Guardianes de la Galaxia Vol. 2 aparece bailando en los créditos finales. La conexión entre la próxima película del Dios del Truno y los Guardianes está asegurada. De hecho, ¿nadie piensa que el tráiler de Thor: Ragnarok se parece peligrosamente a Guardianes de la Galaxia?

Cuando Ego le enseña a Peter a dominar sus nuevos poderes celestiales, este le pregunta si puede usarlos para construir estatuas gigantes de Skeletor, el villano de Masters del Universo, Pac-Man, el videojuego más famoso de los 80, y Heather Locklear, la famosa actriz de los 80 que participó en Dinastía y que la generación de los 90 conoció por Melrose Place.

Y en la película de Marvel con más escenas poscréditos tenemos, como no, la presentación del nuevo villano de la saga que es, nada más y nada menos que Adam. Ayersha, tras ser derrotada, se cabrea tanto que decide crear el ser definitivo, Adam Warlock, que es uno de los personajes más famosos de Marvel. Además, Warlock, será el encargado de unificar A Guardianes de la Galaxia con los Vengadores porque esa Piedra del Infinito que me lleva en la frente tiene que significar algo, por mucho que Gunn se empeñe en desmentirlo.

Y dejamos para el final el diamante de todos los easter eggs.

Ya nos encanta que la historia sobre su padre que el pequeño Peter contaba a sus amigos cuando era pequeño fuera la de un hombre que luchaba contra el mal en un coche que hablaba y que se llamaba Michael Knight. Pero ya que Kurt Russell adopte la forma de David Hasselhoff para convencer a nuestro protagonista de acabar con el universo conocido nos parece sublime…

Gracias por esto, James Gunn.