Scarlett Johansson responde a las críticas por su próximo papel transgénero
Tras las acusaciones de whitewashing en Ghost in the Shell, el director Rupert Sanders y Scarlett Johansson vuelven a verse envueltos en una polémica por su próximo proyecto juntos. Se trata de Rub & Tug, en la que la actriz se meterá en la piel de Jean Marie Gill, una proxeneta que se coronó como reina del negocio de la prostitución en Pittsburgh durante la década de 1970.
Según varios testimonios, Gill habría sido un hombre transgénero que llegó a iniciar un proceso de reasignación de género antes de morir. Por ello, las críticas por el fichaje de la actriz y no de un actor trans se han sucedido en redes sociales:
"Sí, voy a evitar las películas de Scarlett Johansson de ahora en adelante después de su respuesta. Incluso si este tema fuera complejo (y no lo es: las personas trans deberían interpretar a las personas trans), desechar preocupaciones sobre este nuevo papel a la ligera realmente dice mucho sobre la visión que tiene de las personas transgénero".
No hay mucha información sobre Gill, pero su primo, un crítico de cine del Post-Gazette, la describió (vía Vulture) en su obituario como "una anomalía para su tiempo, alguien que tenía que esconder su sexualidad como una mujer soltera en la comunidad transgénero". También se especuló con que Gill "tal vez se hubiera sometido a una fase inicial de cambio de sexo que la hiciera parecer masculina".