Satán, estrella invitada: Nuestros demonios favoritos del cine

En 'The Devil Inside', el Maligno vuelve a poseer a víctimas indefensas. Nosotros hemos decidido cogerle por los cuernos y exigirle que dé la cara: aquí tenéis a nuestros 10 actores favoritos que le han interpretado en la pantalla. Por YAGO GARCÍA
Satán, estrella invitada: Nuestros demonios favoritos del cine
Satán, estrella invitada: Nuestros demonios favoritos del cine
Satán, estrella invitada: Nuestros demonios favoritos del cine

Ya sabemos que no es la expresión adecuada, pero cuando nos enteramos de que se avecinaba The Devil Inside, el filme sobre posesiones demoníacas que llegó este viernes a las carteleras, no pudimos sino exclamar "¡Vaya por Dios!". La película, que llegó al tope de los ránkings de taquilla estadounidenses en su primer fin de semana, nos vuelve a presentar a una pobre y desgraciada víctima con el diablo en el cuerpo, literalmente: que si don de lenguas, que si hablar al revés, que si tener estigmas en las manos, en los pies y en el costado... Qué visto todo, ¿no?

Como decía Peter Venkman, en CINEMANÍA no acostumbramos a poseer a personas poseídas. De modo que, en lugar de redactar un rutinario informe sobre exorcismos o fenómenos paranormales, hemos decidido agarrar por los cuernos al interfecto y exigirle que de la cara de una vez. Con todos vosotros, los 10 actores que se han convertido frente a la cámara en el Príncipe de las Tinieblas, en el Ángel Caído, en el Enemigo, en Lucifer, en Satanás o, para abreviar, en el mismísimo Diablo.

Robert De Niro en El corazón del ángel (1987)robert_de_niro_corazon_angel

Decididamente, Louis Cyphre (anagramático nombre del Innombrable en la película de Alan Parker) es el Satán más estiloso de este informe. No sólo se comporta como un caballero criollo de Nueva Orleans, embrollando con elegancia al desgraciado de Mickey Rourke, sino que posee unas uñas larguísimas y muy útiles para pelar huevos cocidos, y sabe vestirse como un señor. Para colmo, su profesión en nuestro mundo es la de abogado, lo cual nos explica ciertas cosas...

Al Pacino en Pactar con el diablo (1997)al_pacino_pactar_diablo

10 años después de De Niro, su eterno rival del 'Nuevo Hollywood' se apunta a la cosa satánica. Cambiando Louisiana por Nueva York y la contención por el histrionismo, Pacino da vida a un demonio de lo más campechano y amable, dispuesto a enseñarle unas cuantas cosas sobre el mal absoluto a su discípulo Keanu Reeves. Cuando dice aquello de "Dios es un cachondo: os dio instintos, y os prohibió satisfacerlos", este Lucifer nos cae bastante bien. Pero luego recordamos lo que le hace a la pobre Charlize Theron, y...

Elizabeth Hurley en Al diablo con el diablo (2000)elizabeth_hurley_al_diablo_con_el_diablo

No sólo de satanases con traje y corbata vive el cine: la ex de Hugh Grant nos enseñó que el Príncipe de las Tinieblas puede causar todavía más estragos si se convierte en una satanasa de armas tomar. Maciza y tentadora, Hurley se presenta ante un incauto Brendan Fraser, al quien (a cambio de su alma, ¡faltaría más!) concede deseos con letra pequeña. Nuestro momento favorito: cuando el pobre Brendan se transforma en un crack de la NBA tan grande de estatura como pequeño en 'dotación'.

Harvey Keitel en Little Nicky (2000)harvey_keitel_little_nicky

Como no podía ser menos, prestándole su rostro el Señor Lobo de Pulp Fiction, el Satán que nos presentó esta comedia es un ser existencialmente atribulado. Porque no se trata sólo de que su hijo menor sea un inútil total, incapaz de atormentar a los condenados o de hacer villanías como es debido. Es que, además, el engendro es... ¡Adam Sandler! Así las cosas, entendemos que Harvey maldiga el día en el que [SPOILERS] traicionó a su causa enrollandose con la angelita Reese Witherspoon [/SPOILERS].

Jack Nicholson en Las brujas de Eastwick (1987)jack_nicholson_cher_michelle_pfeiffer_susan_sarandon_brujas_eastwick

El mismo año en el que Robert De Niro se convertía en un Señor de las Tinieblas muy señor, su colega de El resplandor y Chinatown se tiraba a la cara grosera y sexual de lo satánico. En este filme, Nicholson demostraba por la práctica aquello de "más sabe el Diablo por viejo que por diablo" llevándose al huerto, por separado y a la vez, a las mismísimas Cher, Susan Sarandon y Michelle Pfeiffer. Iniciadas en los misterios de la brujería por vía sexual, las tres demonias escandalizan a su pacato pueblo.

Tim Curry en Legend (1985)tim_curry_legend

Por más que el satanismo en el cine se pusiese de moda en los 70, estamos comprobando que fue la década siguiente la más pródiga en representaciones fílmicas del Mismísimo. Las cuales, como en este proyecto (fallido, pero encantador) de Ridley Scott podían llegar a cotas realmente excesivas: a fin de atraer a Mia Sara hacia la perdición, y de fastidiar a Tom Cruise, el protagonista de The Rocky Horror Picture Show se calzaba un maquillaje de padre y muy señor (de la oscuridad) mío, con unos cuernos que ni un Vitorino.

Emmanuelle Seigner en La novena puerta (1999)emmanuelle_seigner_novena_puerta

Tras tanta sutileza, tanta elipsis y tanta mano peluda en La semilla del Diablo, Roman Polanski volvió por los fueros de la Goecia enseñándonos al Maligno en carne y hueso. Y qué carne, lectores, porque en esta adaptación de Arturo Pérez-Reverte era la rubia francesa la que se ponía satánica para conquistar a un Johnny Depp cazador de libros. Más de uno vendería su alma por vivir una escena de sexo y llamaradas tan contundente como la que aparece en esta película. Y más de una, sospechamos que también.

Gabriel Byrne en El fin de los días (1999)gabriel_byrne_el_fin_de_los_dias

Con el cambio de milenio, muchos fueron los filmes que nos presentaron a Satanás tratando de conquistar el mundo, traer el infierno a la Tierra y todas esas cosas. Pero, tras poseer (en el sentido tradicional) al protagonista de Muerte entre las flores, el maligno necesita poseer (en el sentido bíblico) a la maciza Robin Tunney, a fin de celebrar la Nochevieja concibiendo al Anticristo. Menos mal que, aun en plena decadencia, Arnold Schwarzenegger es un hueso duro de roer incluso para el ángel caído.

Satán en South Park: Más grande, más largo y sin cortes (1997)satan_south_park

Si de las chanzas de Trey Parker y Matt Stone no se libra ni el mismísimo Jesucristo, es lógico suponer que su rival de allá abajo tampoco se salvará. Por si fuera poco con aparecer más bien feo (compárese su horrible aspecto con el savoir faire de otros miembros de esta lista), y con compartir cama con un Saddam Hussein que le trata a patadas, el Satán de South Park se lleva un número musical cursi donde los haya, digno de un momento particularmente ñoño de Disney. ¡Esto no tiene perdón de Dios!

Harvey Stephens en La profecía (1976)harvey_stephens_profecia

Ya sabemos que nos acordamos hace poco del bueno de Damien, en nuestro informe sobre niños siniestros, y que el chaval no es propiamente el Príncipe de la Mentira, sino más bien su hijito. Pero esta lista no estaría completa sin recordar su mirada fija, su altivez de niño mimado y esos desastres que se suceden a su alrededor. Además, en el infierno, como lugar de vicio y depravación, el nepotismo manda, y el chaval tiene que salir porque lo dice su papá. ¡Qué demonios!

Todos los días, a todas horas, noticias de cine y series en CINEMANÍA.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento