¿Qué fue de los 'Sospechosos habituales'?

El 'thriller' de misterio más enigmático de los 90 cumple hoy 16 años, la mayoría de edad penal. Por ello, hemos abierto un expediente de busca y captura contra sus protagonistas. Por YAGO GARCÍA
¿Qué fue de los 'Sospechosos habituales'?
¿Qué fue de los 'Sospechosos habituales'?
¿Qué fue de los 'Sospechosos habituales'?

Tal día como hoy, hace 16 años, un barco ardió en llamas en el puerto de San Pedro (California). A bordo del buque, 27 cadáveres y una pregunta: "¿Quién es Keyser Sozé?". Gracias a dicho enigma, Sospechosos habituales se convirtió en el thriller más adictivo de los 90 con permiso de Se7en, poniendo a su director Bryan Singer en el candelero, alentando la carrera de alguna estrella en ciernes que otra y dejándonos con un montón de dudas... Que CINEMANÍA te resolverá hoy, porque los 16 años marcan la mayoría de edad penal en España, y suponen el momento justo para abrir un expediente de busca y captura contra la banda de Dean Keaton. A continuación encontraréis nuestros hallazgos al respecto, pero os aconsejamos una prudente reserva hacia todo lo que leáis. Porque, ya se sabe: "el mejor truco del diablo fue convencer a todo el mundo de que no existía".

Bryan Singer (director)

Historial delictivo: Tras dejar Nueva York y California hechas un solar con Sospechosos habituales, Singer se apuntó a un Verano de corrupción adaptado de un relato de Stephen King. En dicho filme trabó amistad con el forajido británico Ian McKellen, con quien repitió en las dos primeras entregas de la trilogía X-Men (2000 y 2003). Creador de la serie House, Singer experimentó un relativo bajón creativo en Superman Returns y Valkiria, sus siguientes trabajos, pero participar como productor en X-Men: Primera generación ha vuelto a ganarle el amor del fandom.

Christopher McQuarrie (guionista)

Historial delictivo: Considerado por algunos como el auténtico cerebro en la sombra de la operación, McQuarrie ha mantenido un perfil bajo tras el hallazgo del buque fantasma, que le proporcionó un Oscar al Mejor Guión Original. Aparte de sus trabajos para Singer (Valkiria), McQuarrie sólo ha entregado un discreto debut como director (Secuestro infernal, 2000) y el poco lucido libreto de The Tourist. Sin embargo, en los próximos años aparecerá en los títulos de crédito de Misión Imposible: Protocolo Fantasma, Jack The Giant Killer (también con Singer) y One Shot, su segundo trabajo tras la cámara.

Gabriel Byrne (Dean Keaton)

Historial delictivo: Antes de Sospechosos habituales, este actor irlandés era un sólido secundario, con escasas excepciones (Muerte entre las flores, Cool World). Tras Sospechosos habituales la cosa siguió más o menos igual: le encontramos en los créditos de filmes interesantes (El año en que murió Elvis, Spider), entretenidos (El hombre de la máscara de hierro) o simplemente inanes, como El fin de los días, encarnando al adversario satánico de Arnold Schwarzenegger. Entre 2008 y 2010 protagonizó la serie En terapia.

Benicio Del Toro (Fred Fenster)

Historial delictivo: 'Condenado' por su origen latino a encarnar a narcotraficantes (como en 007: Alta tensión) y chulazos con guitarra (como en el vídeo de Madonna La Isla Bonita), el portorriqueño experimentó un empuje vertical hacia arriba tras su inmersión en las intrigas de Bryan Singer. Sus actividades criminales han incluído Miedo y asco en Las Vegas (drogas al por mayor), Traffic (infiltración en los cuerpos policiales), las actividades políticamente sospechosas del Che de Steven Soderbergh y los asesinatos sobrenaturales de El hombre lobo.

Stephen Baldwin (Michael McManus)

Historial delictivo: Como puede verse por su apellido, este actor pertenece al clan criminal encabezado por Alec, Daniel y William. Pese a sus vínculos familiares, su carrera se ha desarrollado sobre todo en telefilmes, trabajos directos a dvd y filmes (Los Picapiedra en Viva Rock Vegas, Flyboys) que parecen lucir el cartel de 'trabajo alimenticio'.

Kevin Pollack (Todd Hockney)

Historial delictivo: Más conocido como comediante de escenarios que como actor, Pollack debutó en Hollywood con los 30 ya cumplidos (Willow) y nunca ha gozado de las mieles del éxito. Coincidió de nuevo con Gabriel Byrne en El fin de los días, y Kevin Smith ha contado con él para su experimento Red State: esos son los mayores hitos de una carrera cuyos trabajos (como en el caso de Stephen Baldwin) han llegado a España, en su mayoría, directos a dvd.

Kevin Spacey (Roger 'Verbal' Kint)

Historial delictivo: Estamos sin duda ante el miembro más peligroso de la banda de Keaton: para demostrarlo, sólo hay que ver sus evoluciones [SPOILERS] como asesino psicópata en Se7en [/SPOILERS]. Pese a su apariencia de pringado, o tal vez gracias a ella, este profesional de la estafa se llevó una estatuilla dorada como Mejor Actor de Reparto por Sospechosos habituales, jugada que repetiría a lo grande en 1999, coronándose como Mejor Actor Principal por American Beauty. Nos tememos que trabajos posteriores como Cadena de favores, 21 Black Jack y Beyond the Sea, entre otras, no han estado a la altura de su talento, pero es posible que vuelva al primer plano gracias a sus villanías laborales en Cómo acabar con tu jefe. Aconsejamos una extrema precaución.

Pete Postlethwaite (Kobayashi)

Historial delictivo: Frío e impasible, como corresponde a un profesional británico del crimen, Postlethwaite fue uno de los actores más queridos del Reino Unido gracias a papeles secundarios entrañables y sólidos (En el nombre del padre, Tocando el viento). Postlethwaite falleció en enero de 2011 a los 64 años, dejando una maratoniana carrera con 94 títulos según iMDB. Sus últimos trabajos fueron Origen, The Town: Ciudad de ladrones y la aún inédita en España Killing Bono.

Chazz Palminteri (Detective Dave Kujan)

Historial delictivo: Si la estupidez fuese un delito, el oficial Kujan del Cuerpo de Aduanas de California sería el criminal más peligroso de esta lista. En cuanto a su intérprete, aclamado como el sucesor natural de Joe Pesci gracias a su desparpajo gangsteril en Balas sobre Broadway, parece preso de sus dos registros básicos: gángster de pocas luces (así se enfrentó a Robert De Niro en Una terapia peligrosa) y policía con mala leche, como en la muy infravalorada La huella del crimen.

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