Moulin Rouge es mucho más que un filme que los espectadores recuerdan con nostalgia de sus infancias y adolescencias. El musical dirigido por Baz Luhrmann y protagonizado por Nicole Kidman y Ewan McGregor se ha convertido en un título de culto, un fenómeno que, 20 años después de su estreno, sigue sonando fuerte a Your Song, de Elton John, y Heroes, de David Bowie, entre otros clásicos.
Nicole Kidman, a la que su papel de Satine valió su primera nominación al Oscar (se lo llevaría un año después por Las horas), ha querido celebrar ahora el 20 aniversario de una de sus películas más aclamadas. Lo ha hecho compartiendo con sus seguidores en redes varias imágenes emblemáticas del musical, así como un par de posados con McGregor:
"Algunos de mis recuerdos favoritos de Moulin Rouge. Lo mejor que aprenderás es a amar y ser amada", ha escrito la actriz, en referencia a la producción. La también australiana Kylie Minogue, que salía brevemente en Moulin Rouge haciendo de hada, ha comentado el post de Kidman, asegurando que la actriz es "un icono" por su trabajo en el musical.
Sin duda, su papel de estrella rutilante enferma de tisis encandiló a crítica y público, y la consagró como una de las mejores intérpretes de su generación. Así, no es de extrañar que Kidman se haya querido acordar de Satine y de la obra de Luhrmann en una fecha tan señalada.
Tras el estreno de Moulin Rouge en mayo de 2001, la producción se convirtió en todo un fenómeno pop, también por su banda sonora, y estuvo nominada a ocho premios Oscar (entre ellos, a mejor película). 20 años después, la película sigue siendo un referente en el género musical. Al fin y al cabo, como diría Ziegler (Jim Broadbent): “El espectáculo debe continuar”.
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