Más mujeres, más riesgo y más inquieto: así es el renovado Cinema Jove

Conflictos de género, familiares o de identidad: cada vez que se habla de cine joven parecen salir siempre a colación las mismas problemáticas, pero las encrucijadas personales de las películas de 2017 que retratan a los menores de 30 años no son ni cuentan lo mismo que las de hace 32 años. Esas tres décadas y pico, justamente, son el tiempo que lleva en activo Cinema Jove –entregado desde entonces a ser plataforma para nuevos realizadores y espacio para las inquietudes de las nuevas generaciones–, que levanta el telón el 23 de junio con un cambio de rumbo que marca distancias de las anteriores ediciones.

Y con una coproducción hispano-estadounidense como película inaugural: Animal Crackers aterriza desde el Festival de Annecy y está codirigida por los norteamericanos Scott Sava, Tony Bancrofft, responsable de Mulan, y el valenciano Jaime Maestro, ganador del Goya al mejor corto de animación 2013 por El vendedor de humo.

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En su sección a concurso, que cuenta con diez trabajos en su selección, la 32 edición de Cinema Jove se fija en una miríada de historias que le toman el pulso a las alegrías y el desasosiego contemporáneo. Para empezar, la cinta belga Even Lovers Get the Blues, de Laurent Micheli, nos sitúa en el torbellino de amistad y sexo de un grupo de amigos treintañeros en la Bruselas actual. También la película polaca Satan Said Dance, de Katarzyna Rosłaniec, se detiene en la desinhibida generación ‘millenial’ bajo una propuesta estética que bebe del caleidoscopio formal de las redes sociales y del descaro del concepto Snapchat. La brasileña La mujer del padre, por otra parte, se detiene en las tensiones entre un padre, ciego, y su hija, atrapados en un rincón rural en la frontera de Brasil con Uruguay.

Más dramas iniciáticos del programa: Seventeen, de Monja Art, sigue los azares de una chica enamorada de una de sus amigas de clase; mientras que la mexicana Los años azules, de Sofía Gómez Córdova, nos presenta a cinco jóvenes veinteañeros en sus roces dentro de una viaja casa en la que conviven y dan forma a sueños y frustraciones.

Con el fin de abrirse a nuevas cinematografías y dar espacio a proyectos de riesgo, la sección oficial de Cinema Jove ha programado la película de Sri Lanka Burning Birds, de Sanjeewa Pushpakumara, que ofrece un retrato de la guerra civil de más de 25 años que sufrió el país; así como la sudafricana The Wound, de John Tregove, un trabajo que pone en escena nuevas masculinidades y sexualidades con un rito de iniciación algo violento en el centro del relato.

Para terminar, la hindú Sexy Durga, de Sanal Kumar, se atreve con un drama de terror psicológico que sigue a una pareja en plena huida nocturna; la colombiana La defensa del dragón presenta a tres amigos refugiados en la seguridad de sus mundos; y la argentina Vigilia, de Julieta Ledesma, modula el imaginario bíblico para un trabajo que narra la historia de una locura en un pueblo perdido del país.

DEL ARTE URBANO A LA GENERACIÓN ERASMUS

Uno de los ciclos más atractivos del programa de Cinema Jove es la sección 'Art & The City', que se celebrará en un solar de la ciudad y que, con los siete filmes que lo componen, de la ficción al documental y el cine experimental, busca ofrecer un recorrido transversal del fenómeno del arte urbano.

Style Wars (Tony Silver, 1983) es uno de los filmes paradigmáticos del street art y retrata la transformación visual y urbanística de un Nueva York transformado en lienzo y campo de batalla de los principales artistas de la escena de los ochenta. Veinte años después, Fame, de Giacomo Abbruzzese y Angelo Milano, nos lleva de viaje a la localidad italiana de Grottaglie, convertida entre 2008 y 2012 en uno de los epicentros del arte urbano del mundo.

'Art & The City' incluye el debut cinematográfico del ubicuo y misterioso Bansky, Exit Through the Gift Shop; la colombiana Los hongos (Óscar Ruiz Navia, 2014); así como The NeverEnding Wall, de la valenciana Silvia Carpizo; y la estadounidense Bomb the System (Adam Bhala Lough, 2002), también ubicada en las calles de la Gran Manzana.

El programa se completa con el cortometraje valenciano Muro, dirigido por David Molina y Rafa Casa, que sigue a tres artistas del street art reconocidos a nivel internacional; la miscelánea de cortos Metagraffiti, compilación de más de 20 piezas que reivindican el estatus de esta forma de expresión y de subcultura urbana,

Cinema Jove también ha programado un ciclo que conmemora los 30 años de becas Erasmus, y que incluye la ópera primera de Elena Martín como directora, Júlia Ist. Precisamente, Elena Martín, junto con Adrián Lastra, son los nuevos talentos premiados en esta edición del galardón ‘Un futuro de cine’, que se concede cada año. El otro homenajeado de la 32 edición del certamen es Pablo Trapero, galardonado con el Luna de Valencia y de quien se podrá ver toda su filmografía. Y uno de los últimos nombres propios de 2017 es el de David Lynch, cuya etapa temprana –Cabeza borradora, El hombre elefante, Dune y Terciopelo azul– podrá verse en pantalla grande en el marco del festival.

TERRITORIO CORTOMETRAJE

La sección de cortos es el último plato fuerte de un festival que se entrega al formato. En esta 32 edición hasta 64 piezas, muchos títulos seleccionados en Cannes, Toronto, Locarno, Rotterdam, Berlín, Annecy y Hot Docks Canadá, competirán por el Premio oficial del jurado y por el nuevo Premio Feroz que otorga la Asociación de Informadores Cinematográficos de España.

Para concluir, entre las proyecciones especiales destaca la película de Gabriel Velázquez y Blanca Torres Análisis de sangre azul, que será musicalizada en directo la noche del día 29 de junio por el DJ DJ H4L 9000, en una sesión en la que se darán cita el cine experimental, la imaginería médica y la vanguardia musical.