Hollywood 'fumeta': 20 figuras del cine (muy) aficionadas a la marihuana

Una larga lista de actores, actrices y directores que se han dado al fumar cosas ilegales, y cuya afición pasó a la luz pública, bien por propia confesión, bien por las usuales vías de la foto paparazza o el arresto policial. Te aseguramos que algunos de los nombres te sorprenderán, y otros quizá no tanto...

Ahí la lleva Billy Ray Cyrus: uno cría a su hija como epítome de la joven América conservadora, la pone en manos de Disney para que la chavala se convierta en toda una Hannah Montana... Y, en el contexto de la fiesta de su 19 cumpleaños, a la vástaga se le va la lengua. En el sarao no contenta con recibir de sus amigos lo que se definió como "una tarta Bob Marley", Miley Cyrus reconoció tener las neuronas en punto muerto al pronunciar su discurso. La razón aducida por la joven estrella: "Fumo demasiado de esa puta hierba".

El infortunado papá ya tuvo que ver  cómo un vídeo de su hija fumando salvia divinorum (un alucinógeno legal en Los Ángeles) recorría la Red, declarando entonces en su Twitter que "no tenía ni idea" de las aficiones tóxicas de su hija y que se sentía "muy triste" por las imágenes.

Sin embargo, hemos de decir que, aunque Miley Cyrus se ponga tibia de maría (cosa que ni afirmamos ni desmentimos), no es la primera figura de Hollywood que se da al cigarrito de la risa.

El villano de La noche del cazador debería ser el santo patrón del Hollywood fumeta: Mitchum se aficionó a la maría en su adolescencia, cuando era un vagabundo precoz, y perseveró en ello hasta el punto de ser arrestado por posesión en 1948 junto a su amante, la también actriz Lila Leeds. Tras dos meses de talego, el actor volvió a las calles gracias a la intercesión del millonario Howard Hughes, para encontrarse con que el público, lejos de condenarle, consideraba su descarada actitud durante el proceso como un jalón más en su carrera como antihéroe. Así nos explicamos que grabara aquellos discos de calypso antillano.

Estamos en Filipinas en 1977. Nuestro italoamericano gordo favorito, empantanado en el rodaje de Apocalypse Now y con drogatas de la talla de Dennis Hopper pululando a su alrededor, encuentra solaz y alivio en los productos locales. "Comencé a fumar habitualmente en Apocalypse...", declaró posteriormente Coppola. "Era como en Vietnam: había hierba por todas partes y todo el mundo se hinchaba". ¿Por qué será que esto nos suena de algo?

Con su pinta de buena chica y ejemplar ama de casa, la señora de Joel Coen nunca se ha cortado un pelo a la hora de proclamar sus afinidades fumables. McDormand ha llegado incluso a aparecer en la portada de High Times, revista pro-legalización, posando peta en mano y con la emblemática hoja de marihuana en su camiseta. Por otra parte, en su libro Sexo, mentiras y Hollywood, el gran Peter Biskind recoge declaraciones de un antiguo vecino de los Coen quien, al verles en la prensa gracias al éxito de Sangre fácil, se sorprendió al reconocerles como los colgaos oficiales de su barrio. Después de saber esto, seguro que revisas El gran Lebowski con otros ojos (enrojecidos).

Ya que ha salido 'Su Notísima' en la conversación, está bien recordar que Bridges estuvo a punto de rechazar ese papel cuando los Coen se lo ofrecieron. Pero no porque el guión no le gustase, sino porque se veía demasiado reflejado en él. Este mes de agosto, el barbudo más querido de Hollywood reconoció que aún da una calada de vez en cuando, pero con moderación. "Si me lo ofrecen, está bien, pero no es un hábito", dijo. Y añadió: "Estar sereno te da un subidón importante".

¿A que esta no te lo esperabas? La actriz, cantante y directora más demócrata y más judía de Hollywood reconoce haberse aficionado a la hierba casi por accidente: "Empecé fingiendo que fumaba, encendiendo los porros y pasándolos rápidamente, sin tragarme el humo", comentó. Pero claro, Barbra se fue aficionando, y eso llegó a oídos de gente poco recomendable: "Los camellos que pasaban en el Sunset Strip [de Los Ángeles] se enteraron, y empezaron a mandarme material gratis: acabé teniendo el mayor almacén de maría del mundo".

Al igual que Frances McDormand, Woody Harrelson pertenece a la división de los fumetas orgullosos de Hollywood: desde 2003, forma parte del consejo asesor de la asociación pro-cannabis NORML, las pilladas fotográficas que le muestran dándose al peta con fruición abundan y, para colmo, ha colaborado con Ziggy Marley, hijo de Bob Marley, grabando coros en uno de sus discos. "La maría me sienta bien, y ya que en nuestra sociedad todos somos adictos a algo, no creo que sea una mala opción", sentencia.

A diferencia de otros actores, afectos al tradicional papel de liar, el amigo inseparable de Ben Stiller prefiere intoxicarse usando pipas. Y bien caras, además. ¿Cómo lo sabemos? Pues por el testimonio según el cual Owen pagó 225 euros por una cachimba de diseño en una popular green shop de Los Ángeles, en 2009. Recién recuperado de un intento de suicidio, el actor "estaba tan nervioso que se tiró diez minutos escondido antes de salir pitando hacia su coche". Así las cosas, pillar el ritmo pausado de las películas de Wes Anderson le tiene que resultar muy fácil.

La oscarizada sudafricana se muestra fina y elegante hasta las últimas consecuencias... Salvo cuando de la marihuana se trata: según la foto que podéis ver arriba, tomada en 2004, la protagonista de Monster gusta de darse al vicio usando una técnica tan teenager como pasar el humo a través de una manzana.

Como buenas amigas, las dos compañeras de Los ángeles de Charlie lo comparten todo. Y, por lo que se ve en la foto de arriba, tomada a traición en 2007, ambas respetan el sagrado principio de "quien lo lía, lo peta". Dadas otras declaraciones de la Diaz, no nos extrañaría que, en pleno cebollón, ella y Barrymore optasen por echar unas risas viendo una porno.

Atención, porque esta viene de buena fuente: según nada menos que Quentin Tarantino, Brad mintió como un bellaco al afirmar que había renunciado a los porros por el bien de su prole. Unas declaraciones de Quentin a un programa radiofónico en 2009 nos hablan del actor y el director sirviéndose de una lata de refresco para consumir las chinas que Pitt cortaba de "un bloque de hachís grande como un ladrillo". Las ex de Pitt Juliette Lewis y Jennifer Aniston también han reconocido su afición al cannabis, y se rumorea que esta última y el actor compartieron un chirri antes de una recepción en la Casa Blanca.

Ya que estamos en harina, es de ley decir que el genio de la gran mandíbula nunca ha hecho ascos a reconocer lo suyo. El año pasado, Tarantino se apresuró a afirmar que su amigo Pitt y él eran unos profesionales: "Brad no fuma cuando actúa, ni yo lo hago cuando estoy en un rodaje". Por otra parte, el cineasta admite que la conversación porreta del comienzo de Pulp Fiction está basada en experiencias reales durante un viaje a Amsterdam, donde acostumbraba a pillar en un coffee shop llamado Betty Boop.

Por mucho que la opinión pública la vea como a Bella de Crepúsculo, las aficiones privadas de la Stewart se parecen más a las de Joan Jett, su personaje en The Runaways: esta foto, tomada en 2008 durante el rodaje de este último filme, escandalizó a muchos de sus fans más puritanos pero la norma de "nada de mordiscos antes del matrimonio" no dice nada acerca de otras aficiones.

En el caso de Lindsay, la sorpresa no sería saber que fuma maría, sino enterarnos de que hay alguna sustancia que aún no haya consumido. En 2004, cuando todavía era una joven promesa, la actriz declaró haber probado los petas, aunque (afirmó) "los odiaba". Sin embargo, fotos tomadas a traición en años sucesivos nos hacen sospechar que mentía.

En octubre de 1999, los vecinos de McConaughey alertaron a la policía porque el actor no les dejaba dormir. Por lo visto, el futuro ex de Penélope Cruz se había pasado con la sustancia verde, y cuando los maderos de Los Ángeles llegaron a su domicilio le encontraron desnudo y tocando los bongos. Matthew fue inmediatamente detenido por posesión de marihuana.

Atención, lectores, porque si hablamos de Black no estamos hablando sólo de un actor y cantante aficionado a la maría. Estamos hablando, nada menos que del Fumeta del Año 2002 para la revista High Times. Tras recibir el galardón, que obtuvo como miembro del dúo musical Tenacious D, Black ha ofrecido conciertos y actuaciones benéficas para la asociación NORML.

Al igual que en el caso de Lindsay Lohan, dudamos que haya una sola sustancia ilegal que el protagonista de Solo en casa no haya probado al menos una vez en su vida. De hecho, el último tropiezo legal documentado de Culkin tuvo lugar en 2004, cuando un jurado de Oklahoma City le condenó por posesión de cannabis y de tranquilizantes diversos.

"Soy un porrero", declaró el ex cantante de N-Sync hace pocos meses durante la promoción de Bad Teacher. "El único efecto que me produce la maría es que dejo de pensar. Mi cerebro a veces necesita apagarse. Hay gente que se encuentra mejor colocado", confesó Justin, quien reconoció haber moderado su hábito recientemente por motivos de salud.

Seguramente el menos familiar de los nombres de este informe, Waylett te sonará más si te decimos que fue el intérprete de Crabbe, uno de los abusones de confianza de Draco Malfoy (Tom Felton) en la saga Harry Potter. En abril de 2009, el rollizo actor británico fue arrestado después de que la policía encontrara marihuana en su coche: el subsiguiente registro domiciliario reveló que Waylett cultivaba en su domicilio diez matas de marihuana valoradas en 2.330 euros. ¿Escamotearía las semillas del huerto de Hogwarts?

Si los legionarios que servían en el Tercio allá por los años 30 volvían a la Península hechos unos grifotas, el director de Platoon regresó a de la guerra de Vietnam con otra serie de hábitos a cuestas. Algo que Stone siempre ha reconocido (y que no se limita a la maría) pero que le ha acarreado algún problema legal que otro, como una detención en 2005 por posesión. "Si no hubiera sido por la hierba y por la música, nunca hubiese vuelto vivo de Vietnam", ha declarado. ¿Qué pensará Fidel Castro de eso?

Como ya hemos visto, el vicio nefando de los petas afecta a todas las clases sociales. De ahí que despidamos este informe con una mención a este actor, de la pijísima serie Gossip Girl, que entró en el club de los arrestados por posesión de marihuana en 2010. Para más INRI, el tropiezo de Crawford con la ley tuvo lugar en Plano (Texas), su pueblo natal.