En Bond 25, Danny Boyle podría haberse convertido en el relevo de Sam Mendes como segundo cineasta 'autor' asociado a la saga de 007. Sin embargo, las inevitables 'diferencias creativas' (dicen las malas lenguas que con Daniel Craig) entraron en juego, con lo que el director de Trainspotting acabó siendo reemplazado por Cary Fukunaga (True Detective). Ahora, en una entrevista con la revista Empire, Boyle ha dado detalles sobre su marcha del proyecto.
"Creo que lo que estábamos haciendo John [Hodge, guionista] y yo era realmente bueno –explica Boyle–. No estaba terminado, pero podría haber salido muy bien". Pero, según el cineasta, los demás responsables de la película "no querían seguirnos por ese camino". ¿A qué camino se refiere? Pues no quiere decirlo: "Sería injusto, porque no sé lo que va a hacer Cary".
Según añade Boyle, Fukunaga se tomó la molestia de contactar con él al hacerse cargo de Bond 25. "Me mandó un mensaje muy amable y yo le deseé suerte", explica. Por lo demás, su conclusión sobre la historia es sencilla: "Fue una pena".
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios